El caricaturista Julio Cesar González, más conocido como Matador, protagoniza en este momento una polémica por cuenta de un meme de Rodolfo Hernández en el que incluyó a la directora de Revista Semana, Vicky Dávila, y a la periodista de La FM Darcy Quinn. El tema fue que, en medio de la polémica por las declaraciones calificadas como machistas de Verónica Alcocer, esta imagen le resultó molesta a más de uno ya que pone a las mencionadas periodistas como seguidoras del ingeniero.
En la imagen, se puede apreciar una imagen de Hernández sin camiseta, en traje de baño y gafas de sol (extraída de un TikTok), junto con el cuerpo de las dos mujeres que originalmente acompañaban al candidato, pero con la foto de la cara de Dávila y Quinn en cada una de ellas.
Un montaje que, según se puede deducir del mensaje con el que lo acompañó, le produjo bastante risa a Matador; caso contrario al de sus seguidores, que de inmediato saltaron para mostrar su rechazo frente a lo que consideraron un acto de misoginia. De hecho, Twitter ya cataloga esa publicación como “potencialmente sensible”.
Al momento de escribir esta nota, la publicación de Matador contaba con más de 300 comentarios, muchos de los cuales incluyen una visión crítica frente a la imagen. “Misógino repugnante. Eres lo que tanto criticas”, “Tu inteligencia y buen humor da para algo más que esto. Es irrespetuoso, teniendo el contexto de su participación como moderadoras de debate” o “A un video espantoso, una pésima adaptación. Misoginia por donde se mire en ambas situaciones”, se puede leer entre los comentarios.
Uno de los que se pronunció, por ejemplo, fue el periodista de Blu Radio Sebastián Nohra, quien aseguró que Matador “hoy no es ni la sombra de lo que fue”.
“Un buen tema de una columna sería escribir sobre la decadencia de Matador. En su momento me pareció el caricaturista más agudo de todos”, opinó el periodista.
Cabe recordar que el origen de la imagen de Matador es un polémico video de Rodolfo Hernández en el que, al ritmo de una canción, aparece con cadenas de oro, gafas y caminando junto a dos mujeres en una finca con piscina. Un momento que luego se comprobó hizo parte de una reunión del ingeniero con varios influenciadores que le daban su apoyo.
Sin embargo, eso no lo salvó de las críticas, menos en estas elecciones en las que el respeto hacia la mujer se ha vuelto un tema transversal. Esto, sobre todo luego de que se conociese un nuevo “Petrovideo” en el que se escucha a Verónica Alcocer, esposa de Gustavo Petro, referirse a la forma en la que las mujeres periodistas logran ascender en su profesión.
“A todas les va bien, todas entran de reporteras y terminan en el mismo canal casándose con los dueños. Pa’ eso entran ahí, ¿pa’ qué crees?”, dijo Alcocer. Frase que le ha generado tal lluvia de críticas que incluso tuvo que salir a pedir disculpas a todas las mujeres que pudo haber ofendido.
Las condiciones de Rodolfo Hernández
Lo cierto es, que la imagen de Vicky Dávila y Darcy Quinn en el meme de Matador no es al azar, sino que en realidad se debe al reciente rifirrafe entre Rodolfo Hernández y Gustavo Petro por el debate presidencial ordenado por el Tribunal de Bogotá, sobre el que el ingeniero puso varias condiciones para que llegase a pasar. Entre ellas, que ambas comunicadoras estuviesen presentes en calidad de moderadoras.
Sin embargo, a pesar de que estas condiciones fueron aceptadas por el candidato del Pacto Histórico, Petro también aprovechó para enviar una pulla a su contrincante: “No tengo ningún problema. Puedo ir a hacer ese debate donde el quiera, como diga, con sus amigas periodistas que le hacen su campaña”.
Algo que, por supuesto, generó tantos comentarios a favor como en contra de Petro. Por un lado, a muchos les resultó igualmente extraña la petición del ingeniero; aunque por otro, varios compañeros de profesión e incluso las mismas periodistas afectadas, no demoraron en rechazar sus palabras clasificándolas como estigmatizantes.
Lo que sí es cierto a la final, es que la polarización cada vez es menos ajena a los diferentes ámbitos de la sociedad, esta vez enfrentando (y afectando) a la prensa colombiana, que ha quedado entre la espada y la pared ante la ordenanza de un debate exprés que no parece que vaya a terminar sucediendo. Señalada además por un candidato y juzgada por otra, volviendo a caer en el plano de los ataques personales.