Los animales de compañía están en un porcentaje amplio de los hogares colombianos y, con los cambios que trae el tiempo, han sido reconocidos como miembros de las familias, algo que no es una exageración. De ello pueden dar fe familias que se reúnen alrededor de un perro o un gato; hay casos más contundentes de personas que viven solas y cuya única compañía es una mascota, para quienes prefieren esa palabra.
Como es lógico, el sustento de estos animales representa una renta y es, en últimas, un gasto fijo. Con la inflación como está (12,8 % en abril de 2023) los precios de los productos alimenticios -unos más caros que otros, dependiendo de las marcas- ha aumentado considerablemente y es inevitable pensar en las problemáticas sociales que acarrea: abandono, raciones demasiado pequeñas, cambio de dieta. Si a eso se le suma que hay comida medicada por condiciones específicas de salud el panorama se nubla más, pues tales productos suelen tener costos más elevados.
A propósito de esta problemática financiera y social, la senadora Andrea Padilla, animalista y del Partido Liberal, radicó en la mañana de este jueves un proyecto de ley para eliminar el IVA (5 %) de la comida para animales de compañía. Wilmer Castellanos, representante del Partido Alianza Verde, es coautor de la mencionada iniciativa.
“Con esta medida buscamos brindarles algo de alivio a los miles de hogares colombianos, principalmente de estratos 1, 2 y 3 en los que hay, al menos, un gato o un perro, y a los hogares de paso y fundaciones que albergan a unos 30 mil animales rescatados y los sostienen con sus propios recursos”, señaló la senadora Padilla.
¿Por qué está más costoso el alimento para animales?
Dentro de los argumentos presentados a la opinión pública por los ponentes del proyecto se expone que la pandemia del virus Covid-19 encareció los costos de insumos como la soya y el maíz, fundamentales en la producción de concentrados canino o felino. Esto, desde que muchos de estos cargamentos quedaron represados en puertos como medida de prevención.
Entre julio de 2020 y abril de 2021 se registró, en puerto, un aumentó del 94 % en el precio del maíz. Si bien es cierto que, del inicio de la pandemia a hoy ha habido alguna estabilización económica, las cifras del último mes de 2022 revelan un incremento del 16,8 % en el precio del concentrado. Si una bolsa de concentrado costaba, por ejemplo, 80.000 pesos en 2021, en 2022 esa misma bolsa se conseguía a 92.800.
“Sabemos que con la medida que propone el proyecto de ley no eliminaremos el problema del alto costo de los alimentos que golpea, principalmente, a quienes albergan a animales rescatados y a los hogares de bajos ingresos. Sin embargo, exceptuar del pago de IVA a un alimento esencial aliviará el gasto de millones de hogares y reducirá las cifras de abandono de animales”.
El proyecto, por ahora, reposa en la Secretaría de la Cámara de Representantes, manteniendo a la espera a quienes, en muchos casos, se sacan el pan de la boca para dárselo a un animal de compañía.