FoUna vez más y casi un año después, James Rodríguez salió aplaudido del Santiago Bernabéu, pero esta vez no llevaba la camiseta blanca número 10 del Real Madrid, con la que fue figura la primera temporada que jugó en el equipo 'merengue'. El colombiano recibió el homenaje del público local convertido en una pieza importante del equipo rival.
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Aunque el Bayern Múnich, para el que hoy en día juega Rodríguez, salió eliminado del estadio español, la presencia del volante de la Selección Colombia fue clave es este partido a muerte que representaba el paso a la final de la Champions League, instancia a la que avanzó sufriendo el Madrid.
El partido de ida, en la casa del Bayern, lo ganó el Real 1-2 faltando pocos minutos para que se acabara. La ventaja era del blanco. Este miércoles, en el partido de vuelta, el equipo del colombiano hizo un buen trámite y aunque iba perdiendo también por 2-1, el gol de James, que empató el encuentro a 2-2, silenció por unos segundos al Bernabéu. James se convertió así en figura de los alemanes y en justiciero del equipo que lo vio partir hace poco menos de un año. Por respeto a la hinchada que tantas veces coreó su nombre, no celebró la anotación y minutos más tarde por poco anota el tercer gol, que hubiese cambiado las cosas.
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Aunque el Bayern salió eliminado de España, el partido para James Rodríguez fue bueno. Pasó lo que los hinchas del jugador querían que pasara, que le anotara un gol al Real Madrid, ya que su salida estuvo marcada por los comentarios de bronca entre el técnico Zinedine Zidane y el colombiano, quien bajo la dirección técnica del francés poco pudo jugar en la cancha. Pero ahora la historia es otra. Jupp Heynckes, el entrenador del equipo alemán, que pronto dejará al Bayern, tiene al colombiano como una de sus mejores figuras. El No. 11 es indiscutible en la formación inicial.
Muchas voces desde España, empezando por los hinchas y más con partidos como el de este miércoles y viendo la categoría que James ha mostrado en las filas alemanas, reclaman la presencia del jugador de nuevo en las toldas del madrilista. James no solo es un buen jugador, sino que es una marca personal que vende por si solo y eso lo sabe muy Florentino Pérez, el presidente del Real, quien fue el artífice para que el colombiano llegara a su equipo. Fútbol y economía, una dupla que cualquier equipo quisiera tener en un solo jugador.
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Para que James regrese al blanco tendrían que pasar varias cosas, entre ellas la salida de Zidane, quien aunque ha dicho no tener problemas con el colombiano, es evidente que no gusta de él o de su juego. También está el tema del préstamo con opción de compra que tiene el Bayern; se ha dicho que el equipo 'bávaro' quiere comprar al volante colombiano y que antes de que se acabe el préstamo le pagaría al Madrid los 45 millones de euros que le valdría el pase. Pero también por otro lado se ha dicho, y son especulaciones, que el Real no vendería tan fácil a Rodríguez.
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El préstamo de James al Bayern se vence a mediados de 2019; así las cosas, el jugador tiene como mínimo un año más en Alemania. Por ahora el futuro próximo del volante está definido. El Bayern lo quiere tener como propio y hay voces que dicen que el Real también. Aunque el equipo de ensueño del colombiano es el Madrid, él está feliz porque tiene continuidad, es figura, el amor del técnico por él es innegable y la hinchada también corea su nombre con pasión en el Allianz Arena.
