El periodista Gustavo Gómez, director del programa 6AM de Caracol Radio, se mostró molesto por una declaración de la vicepresidenta Francia Márquez en la que señaló que habían ciertas informaciones que nunca saldrían en “medios tradicionales”, mientras se refería al nulo cometimiento de homicidios en Buenaventura y otros logros de paz en dicho territorio.
La frase del encontronazo fue dicha el pasado 21 de octubre, en medio de la agenda de diálogos regionales que adelanta el Gobierno Nacional para construir el Plan de Desarrollo, fecha para la cual se tenía previsto que la vicepresidenta liderará uno de estos eventos en Buenaventura, en el Pacífico colombiano.
“Esta noticia no es una noticia que sale en los medios de comunicación convencionales, pero la información de que aquí en Buenaventura se construye la paz, eso es una noticia muy importante para el país. Noticia que no sale en los medios”, fue lo que dijo Francia Márquez en aquella intervención.
Sin embargo, Gustavo Gómez no evitó molestarse con el tema, ya que en su programa radial entrevistó en su momento al obispo de Buenaventura, el monseñor Rubén Darío Jaramillo, sobre la realidad de la violencia en el Puerto y el logro de 37 días sin asesinatos.
El monseñor Jaramillo expresó en aquella entrevista que el tranquilo momento de Buenaventura se debe a los diálogos entre los numerosos grupos delincuenciales que tienen operación allí y se enfrentan en el territorio, dejando un número importante de asesinatos diarios. Cabe recordar que dicho territorio últimamente era objeto de oleadas de terror, que le dieron la vuelta a Colombia por tiroteos a calle abierta entre la Fuerza Pública y criminales que quedaron grabados en video.
“Fruto de esa guerra teníamos de 25 a 30 muertes violentas cada mes, jóvenes entre 24 a 30. Hemos generado confianza hablando con ellos y mirando las posibilidades de ser incorporados dentro del plan de paz del gobierno nacional”, señaló Jaramillo.
Más allá de una cifra en específico, de lo que tanto se habla es la inclusión de los grupos criminales conocidos como “Los Shotas” y “Los Espartanos” en la dinámica de paz total del Gobierno, lo cual fue sellado con un partido de fútbol entre ambas bandas rivales a inicios de octubre. Hoy 24 de octubre se cumplen 40 días de paz.
Un anuncio que el Gobierno dio por lo alto desde inicios de septiembre, cuando el presidente Petro dijo en su paso por Buenaventura que “Shotas” y “Espartanos”, que suman más de 1.500 jóvenes en total, deseaban entrar en diálogo de paz.
Lo cierto es que el Gobierno le ha jugado todas sus cartas a Buenaventura para empezar con un piloto de su “paz total”, teniendo en cuenta el historial de conflicto que ha tenido esta zona de gran importancia económica. Cabe aclarar que eso fue lo que precisamente dijo Francia Márquez en su paso por Buenaventura, anunciando además una serie de proyectos para el desarrollo de este territorio.
El nombre que le pusieron, junto a la directora de la Unidad de Víctimas, Patricia Tobón, fue: Plan Integral para el Desarrollo de Buenaventura, que tendrá como plazo 10 años para cumplirse y en el que además se pondrán a prueba nuevas dinámicas de reparación a víctimas del conflicto.
En este proceso, entre otras cosas, además de programas de bienestar económico, social y cultural, primarán procesos de reconstrucción del tejido social de Buenaventura a través de reparaciones individuales y colectivas, programas de retorno, entre otros.
El Gobierno y los medios de comunicación
Lejos de las buenas noticias en materia de paz, hay un problema en el fondo que se ha venido evidenciando desde algunos medios de comunicación, como en este caso lo dijo Gustavo Gómez, y es que se ha vuelto una constante asegurar que en los medios considerados “convencionales” o tradicionales no se dan noticias positivas de la gestión gubernamental.
Más allá de si puede hacerse un balance real de esta situación, lo cierto es que esta es una posición que viene desde la propia campaña e incluso desde mucho antes, en parte también (a lo mejor) por la dinámica de oposición en la que antes se encontraban las actuales fuerzas de gobierno. Generalmente más aliadas de los medios independientes o considerados alternativos.
Esta posición, de hecho, ya ha derivado en posiciones bastante polémicas como la expresada por el pastor Alfredo Saade, ex precandidato presidencial del Pacto Histórico, quien cuestionó: “¿Por donde le entra la plata a los medios de comunicación para destruir el gobierno de Gustavo Petro?”.
Al final, dicha aseveración Saade no solo no la borró, sino que además la reafirmó cuando una periodista le aseguró que la consideraba un ataque a la libertad de prensa y este le respondió que “lo que sucede es que algunos periodistas se prestaron para construir odio para dividir entre buenos y malos”.
En todo caso, esto de Francia Márquez y Gustavo Gómez termina siendo una señal de un país que lento va reconciliándose, con el reto añadido de una fuerza política con mucha base social que ha estado acostumbrada a resistir para ser escuchada. Sin embargo, ahora en el poder, también es importante que se recuerde la importancia democrática de los medios (de múltiples formatos, privados o públicos, hacen parte de ese ecosistema que se encarga de cumplir con el derecho de los ciudadanos a estar bien informados).
En ese mismo marco, posiciones como la del pastor Saade quedan en una línea muy fina entre la crítica y el intento de censura o estigmatización a los medios de comunicación. Una conversación que por cierto no es nueva y no marca una diferencia en un gobierno que quiere apostarle a un diálogo social. O si no, sin voces contrarias, ¿cómo se supone que dicha conversación tendría un carácter diverso?