Luego de las consultas presidenciales, ya quedó configurada la baraja de candidatos presidenciales que se disputarán el poder legislativo este próximo 29 de mayo. Gustavo Petro, como bien se sabe, lideró su consulta con más de 4,4 millones de votos y desde entonces sigue figurando como uno de los candidatos fuertes junto a Federico Gutiérrez, Sergio Fajardo o Rodolfo Hernández. No obstante, ese protagonismo también le ha valido una mayor revisión y cantidad de críticas a sus propuestas.
La reforma pensional, por ejemplo, ha sido una de las que más ha causado oposición en algunos sectores e incluso en las últimas horas causó un encontronazo entre el periodista Sebastián Nohra y Petro. Todo, a causa de la posición expresada sobre este tema por el candidato del Pacto Histórico en el debate organizado por Revista Semana y el diario El Tiempo.
Cabe recordar que la propuesta de Gustavo Petro ha sido eje de varias disputas y consiste, entre otras cosas, en fortalecer Colpensiones (de carácter público) y promover una transición voluntaria hacia este de los cotizantes de los fondos privados. A eso habría que sumarle un “bono pensional mensual por encima de la línea de pobreza”.
En una pelea que tuvo en diciembre con el entonces precandidato Alejandro Gaviria (hoy fuera de la baraja presidencial), Petro explicó su iniciativa: “La reforma pensional consiste en que el dinero de la cotización financie directamente a los actuales pensionados y deje se ser botín usado por banqueros. Se garantiza la pensión y se liberan recursos estatales para darle un bono pensional a todas y todos los adultos mayores”.
No obstante, todo parece indicar que esta propuesta no fue del agrado del periodista Sebastián Nohra, quien no demoró en trinar: “Nacionalizar los 357 billones de pesos que hoy están en cuentas individuales de ahorro pensional sería el mayor robo de la historia del estado colombiano”.
Sumado a ello, el columnista señaló que la idea de Petro significaría “también dinamitar las señales de estabilidad jurídica del país y la credibilidad del estado en respetar los contratos de particulares. Una amenaza a la cultura del ahorro y un golpe durísimo al desarrollo del mercado de capitales. Una locura absoluta”.
Esta opinión de Nohra generó una gran cantidad de reacciones, entre ellas la del propio Gustavo Petro, quien le recordó que “el traslado de personas privadas a Colpensiones será libre” y que muchas personas en Colombia ya han optado por esa opción.
Frente a ello Nohra respondió: “Senador, usted ayer dijo “las pensiones de los fondos irán a Colpensiones (…) Ese es un ahorro público”. Eso no tiene nada de libre y es un desconocimiento abusivo de un contrato entre privados. Usted propone que el estado confisque para repartir a discreción”.
Pensiones, la manzana de la discordia
En el marco de la discusión por el tema, también se sumaron otros comentarios a favor y en contra de cada una de las partes. Uno de ellos fue el tuitero Carlos Castañeda, abogado especialista en derecho administrativo y laboral, quien consideró que la opinión del periodista “es la defensa a ultranza del interés particular de los banqueros sobre el interés social y público del derecho a las pensiones”.
Por otro lado, Mario Fernando Cruz, quien asegura en Twitter ser economista, contrarió a Gustavo Petro asegurando que el cambio de fondos privados de pensión a Colpensiones “se ha dado para recibir subsidios implícitos que le cuestan 52 billones de pesos al año a los contribuyentes”.
Por esta misma línea se fue el exvicepresidente de Colombia, Francisco Santos, quien opinó que la propuesta de Petro podría llevar a Colombia a un modelo pensional como el de Venezuela.
Así las cosas, la campaña electoral sigue su curso y vuelve a prender motores de cara al 29 de mayo, teniendo de nuevo el tema de las pensiones en el centro del debate, como uno de los fondos millonarios de los colombianos que está en el vaivén del fuego cruzado de la política, algunos priorizando la garantía de la pensión como derecho constitucional (aunque con visiones ambiguas sobre cómo sería ese tránsito hacia lo público) y quienes prefieren inclinarse hacia el derecho de los colombianos a elegir dónde cotizar.