El Centro Democrático redujo su lista de precandidatos presidenciales. El Comité de Ética del partido excluyó al representante Edward Rodríguez de su aspiración a la Presidencia, decisión que evidencia las fracturas en el uribismo de cara a las elecciones del próximo año.
La génesis de esta determinación del partido que dirige el expresidente Álvaro Uribe se encuentra en el pulso que sostenía el representante con Rafael Nieto, también precandidato presidencial. El exviceministro anunció en una pasada reunión de precandidatos que mantendría su aspiración presidencial solo si el partido reconsideraba la precandidatura de Rodríguez, pues tiene varias dudas sobre la idoneidad de su perfil.
Nieto había señalado que si el Centro Democrático avalaba la precandidatura de Rodríguez estaría expresando que su perfil es el adecuado para ser el próximo presidente de Colombia y, desde su punto de vista, el congresista no cumple con las condiciones para integrar la lista de precandidatos.
Ayer, en reunión de precandidatos, el Comité de Ética del partido le negó la posibilidad de aspirar a la Presidencia al representante Rodríguez. Algunas versiones apuntan a que la decisión estaría relacionada con una vieja rencilla con el exmagistrado Marco Antonio Velilla, cuando Rodríguez investigaba el Cartel de la Toga en la Comisión de Acusación de la Cámara.
Lo cierto es que el Comité no ha argumentado públicamente la razón del veto a la precandidatura del representante Rodríguez. Tras la reunión, lo único que dijo el Centro Democrático es que los precandidatos avanzaron en los acuerdos sobre la definición de los parámetros y reglas del mecanismo de elección del candidato presidencial, el cual incluirá a los simpatizantes y militantes del partido y a segmentos de la opinión que comparten nuestra ideología.
El representante ha rechazado la determinación del Comité de Ética de su partido. A través de su cuenta de Twitter, Rodríguez expresó: "Comité de ética me excluye sin motivos de la Precandidatura. Recurriré la decisión ante las instancias pertinentes. He construido partido desde antes que llegarán los actuales precandidatos y defendido los ideales del Centro Democrático. Seguiremos en la lucha".
Además, sostuvo que la decisión atendería a la influencia de un sector clasista del partido que influye en el Comité. Por lo tanto, dijo que "una opinión con tufillo político no me arrodilla, ni tiene el poder de aniquilar mi aspiración de seguirle sirviendo al Pais. ¿No les parezco digno por ser un Rodriguez?".
El representante apeló a que su férrea defensa al Gobierno de Iván Duque y su origen humilde serían la razón por la que su propio partido le negó la posibilidad de aspirar a la Presidencia.
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¿Por qué clasismo? Porque el representante viene del campo, nació en Aquitania, Boyacá, sus padres son campesinos que llegaron desplazados a Bogotá, él tuvo que estudiar en colegio público y sus estudios universitarios los pagó con un subsidio del Icetex, y según el propio Rodríguez, el veto en el uribismo tiene que ver con su origen.
Rodríguez agregó que "A los colombianos un parte de tranquilidad, no he sido sancionado, ni notificado de proceso alguno en mi contra dentro del partido. El veto que hoy pretenden imponerme es un ataque mezquino a mi buen nombre, mi verdadero patrimonio".
El representante cerró su pronunciamientos anunciando que será el expresidente Álvaro Uribe y el Centro Democrático quienes tienen la última palabra sobre su precandidatura. Sin embargo, por ahora hay completo silencio sobre este importante tema.
Así las cosas, la baraja de precandidatos del uribismo queda integrada por Óscar Iván Zuluaga, María Fernanda Cabal, Paloma Valencia y Rafael Nieto.
