El pasado fin de semana se desataron al menos 1.100 nuevos incendios que complicaron aún más el panorama en Brasil donde ya se registraron 80.626 focos de fuego en lo que va del año, una cifra muy por encima de los 45.085 casos medidos en el mismo período de 2018, según informó el Instituto Nacional Investigaciones Espaciales (INPE).
El mayor aumento, comparado con el año pasado, se dio en los estados de Mato Grosso do Sul (sudoeste, 299 por ciento), con 4.499 focos, y Rondônia (noroeste, 185 por ciento), con 6.436.
Es por ello que el presidente Jair Bolsonaro dispuso mediante un decreto firmado el domingo el envío de 44.000 soldados de las Fuerzas Armadas para combatir los incendios forestales en los estados de Acre, Mato Grosso y Amazonas (noroeste y norte), que se suman a otros cuatro estados que ya estaban recibiendo asistencia desde el viernes, como Roraima (norte), Rondônia, Tocantins y Pará (noreste).
Se destinaron 38,5 millones de reales (unos 9,3 millones de dólares) para costear los trabajos de combate, dirigidos a la manutención y el Centro de Operaciones Conjuntas entre el Ministerio de Medio Ambiente y el de Defensa. Asimismo, el estado de Amapá (en el extremo noreste) también pidió sumarse al operativo contra los incendios y el desmonte ilegal.Imágenes aéreas demuestran como el gigantesco incendio avanza carbonizando la selva tropical en Brasil pic.twitter.com/SexN99yKOI
— RT en Español (@ActualidadRT) August 25, 2019
Por el humo cerraron las pistas
La Fuerza Aérea brasileña desplegó dos aeronaves Hércules C-130 que tienen un sistema llamado MAFFS (Modular Airborne Fire Fighting System) compuesto por cinco tanques de agua que almacenan hasta 12.000 litros y dos tubos que descargan por la puerta trasera del avión.Los aviones, que salen y entran de la base de Porto Velho (oeste), sobrevuelan la zona afectada a aproximadamente 45 metros de altura, y el lanzamiento a presión dura siete segundos; la propia inercia despliega el agua sobre el fuego cubriendo una línea de 500 metros por vuelo, según información del Ministerio de Defensa posteada en su cuenta de Twitter. Sin embargo, cerca del mediodía de este lunes, el humo provocado por los incendios obligó al cierre de esa pista durante dos horas para las operaciones comerciales, por lo que se cancelaron al menos cinco vuelos que debían salir desde allí con destinos a Manaus, Cuiabá y Brasília. "El aeropuerto de Porto Velho cerró de 9:35 a 10:55 hora local (6:35 a 7: 55 GMT). Fue afectado un vuelo de Latam que estaba esperando aterrizar. La causa del cierre fue el humo, en virtud de la actual situación en la región", dijo al periódico argentino Clarín en Brasilia un portavoz de Infraero, la entidad que administra los aeropuertos de Brasil.A @portalfab emprega, a partir de hoje (24/08), duas aeronaves C-130 Hércules no combate aos focos de incêndio na #Amazônia, partindo de Porto Velho (RO). Confira a ação: pic.twitter.com/Fq4fGddL0O
— Ministério da Defesa (@DefesaGovBr) August 24, 2019