Las agencias de seguridad nacional de Estados Unidos van tras los pasos de dos buques de guerra iraníes, según fuentes citadas por el periódico Politico el 29 de mayo. Se trata de una fragata iraní y del Makran, un buque base avanzado.
Ambas embarcaciones se dirigen al sur por la costa oriental de África, y varias figuras de alto rango estadounidenses recomendaron a Venezuela no recibirlas una vez lleguen al país. Se desconoce su cargamento y si efectivamente su destino es la nación caribeña.
Said Jatibzade, el portavoz del Ministerio de Exteriores del país persa, respondió a la información publicada por 'Político' durante una rueda de prensa por videoconferencia.
"Irán tiene una presencia constante en aguas internacionales sobre la base del derecho internacional y puede navegar libremente por aguas internacionales. Ningún país puede violar ese derecho", subrayó, citado por Hispantv.
El canciller iraní agregó que nadie debe "cometer un error de cálculo", en referencia a las advertencias lanzadas desde Washington a Caracas. "Aquellos que viven en casas de cristal deben ser cautelosos", añadió el diplomático.
A su vez, el portavoz del Gobierno de Irán, Ali Rabiei, al comentar los informes, aseguró que las relaciones entre Teherán y Caracas no van dirigidas contra terceros países.
"Nuestras relaciones con Caracas no están dirigidas contra terceros países, no hay por qué preocuparse", dijo Rabiei en una rueda de prensa.
El portavoz recordó que los "buques de guerra iraníes siempre han cumplido con éxito las tareas de lucha contra la piratería y el contrabando en la zona del Golfo Pérsico".
Rabiei también destacó el derecho de Irán de desarrollar la cooperación con otros países en diversos ámbitos, incluido el militar.
Venezuela e Irán han ido estrechando sus lazos en los últimos años debido a las sanciones de Estados Unidos que pesan sobre ellos. La cooperación se ha basado, entre otras cosas, en el envío de gasolina y proyectos conjuntos para desarrollar fábricas de automóviles y de cemento.
La presencia de buques de guerra iraníes en el Caribe "representaría un desafío a la autoridad estadounidense en la región", sostiene Politico, y avivaría el debate en la Administración de Biden sobre si cabe volver a entablar negociaciones con Teherán.