El presidente Joe Biden tiene como objetivo asegurar un asiento para Estados Unidos en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU casi tres años después de que la administración Trump dejara el organismo mundial.
La noticia la dio este 24 de febrero el secretario de Estado, Anthony Blinken, asegurando que Biden lo usará para denunciar las violaciones a las libertades fundamentales en China, Rusia o Venezuela. "Biden está comprometido con una política exterior que une nuestros valores democráticos con nuestro liderazgo diplomático", dijo Blinken.
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También se anunció la intención de buscar la elección para un puesto en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU a partir de enero de 2022. "Hoy, la administración tomó un importante dar un paso en esa dirección", aseguró el secretario de Estado, recalcando en la importancia de los derechos humanos para el país.
El secretario de Estado, sin embargo, criticó al consejo por lo que llamó "sesgo contra Israel", una crítica citada por el expresidente Donald Trump cuando se retiró del organismo en julio de 2018. Por esa parte, Estados Unidos tratará de reducir el antagonismo que hay con Israel.
Así lo afirmó Blinken cuando dijo en el comunicado que reconocen también "los desafíos en el Consejo, incluido un sesgo inaceptable contra Israel y las reglas de membresía que permiten que países con antecedentes atroces de derechos humanos ocupen puestos que no merecen". Es por ese motivo que buscan un lugar en la mesa del consejo.
A principios de febrero, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó al Departamento de Estado que volviera a interactuar de inmediato con el Consejo de Derechos Humanos como observador.
El CDH, establecido en 2006, es un organismo central de la ONU para promover los derechos humanos. El consejo reúne a 47 estados miembros, que son elegidos por tres años sobre la base de una distribución geográfica equitativa. Entre los miembros se encuentran los países criticado por Estados Unidos: Rusia, Venezuela, China y Cuba.
Con el regreso de Estados Unidos, Blinken afirmó que usarán el foro para "seguir denunciando abusos en países como Venezuela, Nicaragua, Cuba o Irán”. También tienen presente los abusos de la minoría uigur en Xinjang, China, los cuales no han tenido sanciones contundentes.
Con información de Sputnik.