En una conversación exclusiva con KienyKe.com, Iván Trujillo, CEO del Grupo Trinity, ofreció una perspectiva franca sobre el complejo panorama económico actual en Colombia, destacando los desafíos cruciales que enfrenta el empresariado colombiano.
De acuerdo a Trujillo, Colombia, al igual que muchas economías emergentes, enfrenta una serie de retos significativos. Por un lado, describió un entorno marcado por la incertidumbre geopolítica y económica, subrayando cómo Colombia ha enfrentado recientemente desaceleraciones y una inflación persistente.
"Este contexto geopolítico que naturalmente supone un grado muy importante de incertidumbre, pues en Colombia yo creo que todos también estamos siendo testigos de de las complejidades, los retos, las dificultades a las que nos estamos enfrentando.
Recordarán ustedes que el 2024 inició el año con una baja de la perspectiva de estable a negativa por parte de estándar y pues creo que todos estamos viendo en las cifras recientes que se liberan oficialmente la desaceleración o algunos analistas ya hablan de estancamiento económico, otros hablan de un fenómeno de estanflación donde básicamente se conjuga el fenómeno del bajo crecimiento atado a una alta inflación. El panorama fiscal no es menos sombrío, con un alarmante descenso del 40% en el recaudo tributario en comparación con el año anterior. El plan de recorte propuesto por el Ministerio de Hacienda para reducir presupuestos ministeriales no es sino una medida necesaria en tiempos de austeridad y ajuste fiscal”.
Asimismo, el CEO de este grupo que actualmente tiene presencia en cuatro países e inversiones estratégicas en diversas industrias se refirió a la proyección de crecimiento económico para este año que apenas alcanza el 1%, advirtiendo sobre las implicaciones sobre el financiamiento de programas de cambio social y desarrollo con estas tasas, así como la reciente reducción en el recaudo fiscal y los recortes presupuestarios propuestos por el gobierno plantean un escenario de ajuste y prudencia fiscal.
“Yo creo que es muy importante que sea sincera en las cuentas de la Nación. Hoy estamos hablando de datos recientes de cómo el recaudo en el mes de abril fue 40% menor que el del año pasado. Y hemos oído, pues, al ministro de Hacienda de un plan de recorte que puede superar los 20 billones de pesos con las instrucciones de reducción a las 18 carteras ministeriales de cerca del 5.13% de cada uno de sus presupuestos.
Creo yo que lo más importante es que exista una conversación en torno a una agenda de reactivación y crecimiento económico. Y aquí yo quiero hacer un primer llamado: el concepto de crecimiento económico debe despolitizar, porque no existe mejor política social, mejor política de lucha contra la pobreza que una agenda de crecimiento económico. Vimos el año pasado como el crecimiento del 0.6% este año. Las proyecciones, incluso las más ambiciosas, están hablando de uno de un 1% y con un 1% no vamos a poder financiar la agenda de cambio social y de transformación y poder hacerle frente a las grandes necesidades que como país tenemos precisamente como sociedad”.
El tejido empresarial el ADN de la economía colombiana
Un punto central para mantener la vitalidad del tejido empresarial colombiano según Trujillo, es el fortalecimiento y apoyo a las pequeñas y medianas empresas. El abogado especialista en gestión pública destacó el papel crucial de estas empresas como motores de progreso, desarrollo y competitividad, no solo a nivel económico sino también social.
Para Trujillo, gestionar la incertidumbre es fundamental para los empresarios en Colombia por lo que manifestó que la clave radica en promover un diálogo constructivo entre el sector privado, el público, la academia y la sociedad civil para abordar los desafíos comunes.
"Yo creo que lo importante en economías en desarrollo en países como el nuestro, tiene que ver con la importancia de proteger el tejido empresarial, de proteger el sector privado. Como ese motor de fuente de progreso, de desarrollo, de bienestar, de competitividad. Y cuando hablamos de empresarios no hablamos del empresario grande, hablamos del empresario mediano o del empresario pequeño, del empresario micro.
Colombia hoy debe tener un tejido empresarial cercano al millón 800.000 o millón 900.000 empresas, de los cuales el 90% son pequeñas y medianas empresas. Solo una pequeña minoría hace referencia, digamos, al gran empresariado. Y aquí tiene que haber un concurso juicioso por parte de los diferentes sectores donde se promueva un diálogo colaborativo en esa triada que es tan virtuosa entre el diálogo entre la empresa, el sector público, la academia, la sociedad civil en torno a los problemas que nos aquejan, como todos”.
También resaltó la importancia de encontrar puntos de encuentro en medio de diferencias naturales, enfocándose en una agenda de crecimiento económico que trascienda las divisiones políticas:
“Aquí lo importante es pasar de la confrontación y enfocarnos en una agenda de crecimiento económico. La importancia es que exista un tejido empresarial unido, responsable, ético, transparente, como lo es el tejido empresarial colombiano, y repito, no solo el de las grandes empresas, el de las papelerías de barrio, las peluquerías, los tenderos, las ferreterías, los talleres, todo ese tejido empresarial y ese ánimo de empresarismo colombiano es lo que al final del día hace que vivamos en un país con orgullo y que podamos hacerle frente a las coyunturas complejas y turbulentas de cara al futuro”.
El futuro del Grupo Trinity
Con inversiones estratégicas en España, como la reciente adquisición de Clarel, Trujillo destacó el compromiso del Grupo Trinity de llevar la bandera de Colombia a nuevas geografías, mostrando lo mejor del empresariado colombiano en el ámbito global. Subrayó, la responsabilidad social y ética que implica ser un actor relevante en otras economías, apuntando a inspirar a más empresarios colombianos a expandir sus horizontes.
"Grupo Trinity tiene una vocación de liderazgo, de crecimiento, de de llevar, digamos, el nombre de Colombia a diferentes geografías. Les pongo un ejemplo de ello. Nuestra más reciente adquisición en España Clarel, que es una tienda líder del sector de retail con más de mil tiendas a lo largo y ancho del territorio español, 3.500 colaboradores, de los cuales 94% son mujeres, más de 30 nacionalidades y una compañía vibrante que hoy supone el cariño que le asignan los españoles a una marca de conveniencia y ultra proximidad que se encuentra a lo largo y ancho del territorio empresarial. Esta inversión hoy nos posiciona como el mayor inversionista colombiano empresarial en España".
¿Quiénes han marcado el camino del CEO del Grupo Trinity?
Tras 12 años de trabajo en el Grupo Argos, Iván Trujillo llegó para llevar a las 14 empresas que hacen parte del Grupo Trinity a seguir construyendo país. Un proceso de años de estudio y trabajo que le han dejado grandes aprendizajes que hoy guarda como un tesoro para tomar día a día las decisiones que suponen dirigir a una gran compañía.
“Yo he tenido la fortuna y la suerte, si se quiere, de tener tres grandes guías, mentores, líderes, si se quiere, en en mi vida: El primero de ellos mi padre Carlos Holmes Trujillo, que siempre fue un guía, un faro y una persona que al final del día pues nos enriquecía mucho las conversaciones sobre el país, sobre todo.
Adicionalmente Jorge Mario Velásquez, el presidente de Grupo Argos, a quien aprecio inmensamente y de quien estoy profundamente agradecido por todos sus, sus, sus aprendizajes, Todo lo que le aprendí. Y un maestro de vida también. Y también Omar González, el fundador, líder y visionario de Grupo Trinity. Omar González, es el presidente de este grupo empresarial y un lujo de empresario de líder que ha logrado consolidar al grupo Trinity como uno de los grupos empresariales más relevantes.
Hoy decimos que de lo que nos sentimos más orgullosos y lo que más nos llena el corazón no son los grandes negocios, las grandes cifras, el tener presencia en gran en diferentes geografías, sino la responsabilidad que tenemos con esos 14.500 colaboradores que hoy hacen parte del grupo empresarial Trinity. Eso es lo que nos motiva, lo que nos llena de energía y por lo que nos levantamos a trabajar día a día”.
Finalmente, Trujillo enfatizó la importancia de un liderazgo empresarial responsable, ético y transparente, capaz de inspirar tanto a colaboradores internos como a la comunidad empresarial más amplia ya que enfatizó en que había que seguir trabajando a buen ritmo y mirar hacía adelante, destacando el potencial de Colombia para consolidarse como un líder regional en crecimiento económico, siempre y cuando se fortalezca el apoyo al sector empresarial y se promueva una agenda de largo plazo.
“En este cargo uno tiene que inspirar, inspirar a los demás ejecutivos a estar alineados con un propósito superior de compañía, a estar alineados con una visión que en este caso nuestro presidente ha permeado con mucha claridad sobre el respeto a las personas como el eje central de la toma de nuestras decisiones. Y en este caso estamos aprendiendo”, concluyó diciendo.
La visión de Iván Trujillo refleja no solo los desafíos críticos que enfrenta Colombia, sino también las oportunidades significativas que pueden surgir de un compromiso colectivo hacia un desarrollo económico sostenible y equitativo.
