A un debate de convertirse en Ley de la República quedó nuestra iniciativa FEM – Fondo de Emprendimiento para la Mujer que beneficiará potencialmente a más de 12 millones de mujeres de los grupos A, B y C del Sisbén IV, es decir a las más humildes del país. Este fondo permitirá que se le otorgue un capital semilla o ‘plante’ a mujeres que quieran iniciar sus negocios, pero no encuentran el respaldo financiero. Además, es una herramienta muy poderosa para brindarles independencia económica a muchísimas mujeres y acabar con el ‘gota a gota’ que ha desangrado a miles de familias colombianas.
El FEM es un sueño que empezó a construirse desde hace casi tres años cuando, sin proponérmelo, terminé haciendo campaña para aspirar al Senado de la República. Escuchando a las mujeres en las veredas, corregimientos y en tantos recorridos pude ver que todas coincidían con una misma petición: querían tener el impulso monetario para iniciar sus emprendimientos. Muchas alegaban tener que soportar maltratos de sus parejas por ser ellos quienes aportaban el dinero. Por ello, planteaban que si tuvieran su propio negocio podrían ser independientes, empoderarse y sacar adelante a sus familias.
Indagando sobre esta realidad nos dimos cuenta que la violencia intrafamiliar tiene intrínseca una codependencia económica de parte de la mujer. De acuerdo con Medicina Legal, en 2023 se presentaron más de 40.000 casos de violencia contra la mujer, donde el factor más determinante fue la dependencia económica de esta hacia el agresor. Viendo las estadísticas, nos embarcamos desde el primer día que llegamos al Congreso en este propósito de aprobar el FEM, buscando independencia y empoderamiento económico a estas mujeres para que cumplan sus sueños y rompan el ciclo de violencia en sus hogares.
La excelente noticia es que la semana pasada logramos aprobar en tercer y penúltimo debate nuestro proyecto de ley que crea el FEM, el cual estará presente en los 1.123 municipios de Colombia. Con esta aprobación sólo estamos a un paso en la plenaria de la Cámara de Representantes para que se convierta en realidad.
Esta importante iniciativa permitirá que se entregue un capital semilla de manera individual o en cooperativas a las mujeres que presenten sus proyectos de emprendimiento. Dependiendo del negocio, el plante de forma individual iniciará en $650.000 e irá hasta $3’900.000. En el caso de las mujeres que se asocien en cooperativas máximo de 10 integrantes, la capital semilla será de hasta $39’000.000, priorizando a quienes provengan del campo y zonas rurales.
Todas las beneficiarias recibirán capacitación y acompañamiento técnico, financiero y jurídico para que sus proyectos tengan viabilidad y perduren en el tiempo. Adicionalmente, el FEM busca ser una herramienta de fácil acceso para las mujeres con poca escolaridad, simplificando los procesos, minimizando los papeleos y procurando que ellas puedan obtener el beneficio de manera rápida y sencilla.
Este proyecto, el cual está cada vez más cerca de convertirse en Ley, es un sueño no sólo mío sino de esas mujeres con las que construimos juntas esta iniciativa, quienes me dieron sus testimonios y me mostraron la realidad de sus hogares. También será un sueño hecho realidad para millones de mujeres a lo largo y ancho del país que hoy anhelan ese impulso financiero para sentirse independientes, empoderadas y libres.
Para finalizar, según la Banca de las Oportunidades en 2023 uno de cada cinco colombianos accedió al crédito informal a través de los llamados ‘gota a gota’, en su mayoría personas de estratos 1 y 2 que no encuentran respaldo en entidades financieras reguladas. Para colmo de males, muchas de estas personas terminan siendo víctimas de estafa y extorsión o, en el peor de los casos, perdiendo la vida. El FEM también busca poner freno a esta modalidad del ‘gota a gota’, dándole la oportunidad a las mujeres más humildes de iniciar su vida crediticia con un respaldo, formalizando su negocio y apoyándolas técnicamente en todo su proceso de emprendimiento.