El presidente Gustavo Petro continúa cumpliendo con el Plan Nacional de Desarrollo, visitando, respaldando y apoyando a las poblaciones históricamente abandonadas por la derecha. En esta ocasión, el turno fue para Caucasia, Antioquia. En el marco de la Asamblea Popular por la Paz y la Vida, acompañamos al presidente, al Ministro de Minas y Energía, a la Agencia Nacional de Minería en la inauguración del Punto de Atención Local (PAL) de la Agencia Nacional de Minería, una oficina que brindará asistencia directa a los mineros, facilitando procesos administrativos y promoviendo la formalización y legalidad minera, de forma gratuita, sin necesidad de intermediarios, un avance significativo en pro del desarrollo minero del municipio.
Durante la jornada se llevó a cabo un diálogo con la comunidad con el objetivo de fortalecer y regular la actividad minera en el sector. Además, se organizó un espacio académico y de atención a la población, donde se les proporcionó información detallada sobre los procesos y servicios ofrecidos por la Agencia Nacional de Minería, procurando la consolidación del conocimiento normativo y brindando apoyo a todos los interesados en el sector.
En este contexto, se otorgaron 156 licencias a pequeños y medianos mineros, quienes fueron olvidados por gobiernos y administraciones pasadas. Desde el año 2001, tras la entrada en vigencia del Código Minero de Andrés Pastrana, estos mineros se convirtieron en un objetivo perseguido por el Estado al ser catalogados como ilegales. Hoy, el gobierno del cambio busca rescatar, legalizar y sostener esta actividad económica, siendo uno de sus objetivos desde la campaña electoral reformar el código minero para convertirlo en un apoyo a la pequeña minería y a la minería ancestral de Colombia. Es un compromiso claro; el presidente se ha propuesto alcanzar 500 formalizaciones en los próximos meses, marcando así el inicio de una de las legalizaciones más importantes que se han llevado a cabo en el país.
Además del sector minero, nuestro presidente presentó a la comunidad su propuesta de desarrollo rural. En este sentido, solicitó al alcalde del municipio realizar una reunión con los dueños de las tierras fértiles que no estén siendo productivas, con el fin de que el Estado las adquiera a precio justo. Manifestó que, si algunas de estas tierras improductivas estuvieran cerca de la zona urbana, podrían ser destinadas para la construcción de viviendas de interés social, abordando así una de las problemáticas identificadas en Caucasia, como lo son el acceso al agua, la vivienda y la actividad minera, problemáticas por las que se seguirá trabajando.
Esta visita, estos avances en la legalización y protección, acompañamiento a los medianos y pequeños mineros reflejan el compromiso de nuestro gobierno del cambio en pro del desarrollo sostenible de la región y el país. A través de prácticas de economía popular, asociatividad y solidaridad, de trabajo en conjunto con las cooperativas, asociaciones mineras en los territorios, promoviendo un modelo de desarrollo inclusivo y equitativo que beneficie a todas las comunidades, especialmente aquellas históricamente marginadas.