La Corporación Excelencia en la Justicia pidió meterle el acelerador al proceso contra Leonidas Bustos, uno de los exmagistrados de la Corte Suprema de Justicia salpicados en el escándalo de corrupción del cartel de la toga.
A través de un comunicado de prensa, la corporación indicó que reconoce y exalta la reciente decisión de la justicia con relación a la "ejemplarizante condena" impuesta al exmagistrado Francisco Ricaurte Gómez, quien fue sentenciado en primera instancia a 19 años de prisión por este mismo caso.
En este orden de ideas, la Corporación Excelencia en la Justicia informó a la opinión pública que solicitará ante la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes que, "para cerrar el ciclo de este tema tan escabroso", se tramite de manera rápida y oportuna el proceso contra Leonidas Bustos y también el del también exmagistrado Gustavo Malo.
A su vez, indicó que gestionará ante las autoridades competentes una petición para que impulsen medidas a efectos de que Bustos Martínez comparezca ante la justicia colombiana, siendo trasladado desde Canadá, donde presuntamente se encuentra en plena impunidad.
"En ese sentido, para este centro de pensamiento, se deberá emitir en su contra una circular roja de Interpol y una orden de extradición", informó.
Una de las últimas veces en las que se le vio al exmagistrado Leonidas Bustos fue en el juicio de Francisco Ricaurte, donde se presentó como su testigo.
En la audiencia, Bustos aseguró que “jamás tuvo alguna relación” con el exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno, quien ya fue condenado por el escándalo del cartel de la toga. Según manifestó, “nunca lo indujo a cometer actos de corrupción”.
“No tuve ninguna clase de relación de ese tipo con Luis Gustavo Moreno. Nunca lo presenté para ningún proceso, nunca lo apoyé en ninguna aspiración. Tampoco para ningún cargo privado ni para uno público, mucho menos para que llevara casos dentro de la Sala de Casación Penal. Nunca lo recomendé ni lo patrociné en nada”, agregó.
Cuando le preguntaron por Francisco Ricaurte, a quien se le señala de haber recibido millonarias sumas de dinero para torcer procesos judiciales en favor de investigados, Bustos afirmó que sí fueron amigos pero que “no fue una relación estrecha o íntima”.
“Éramos amigos, tomábamos café y hablábamos temas relacionados al derecho. Era una relación normal, pero no íntima”, indicó.
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Aseguró que en ningún momento el exmagistrado Francisco Ricaurte le ofreció dinero a cambio de alguna actuación ilegal y tampoco sintió que él intentara ejercer alguna influencia en contra suya para que cometiera actos de corrupción.
“Ningún magistrado tenía alguna incidencia intelectual encima de nadie. Todos teníamos experiencia como docentes, magistrados, litigantes, como jueces. Todos tenían experiencia, formación jurídica y cualquiera era capaz de debatir cualquier tema con propiedad y solvencia, nadie ejercía ninguna influencia ni física, personal ni intelectual sobre otro. Se buscaba el mejor argumento, el deseo era siempre el de acertar”, manifestó.
