'La Casa de los Famosos' sigue dando de qué hablar, especialmente tras salidas inesperadas como la de La Liendra, quien recientemente abandonó el reality de convivencia. Su paso por el programa fue una montaña rusa emocional y, como era de esperarse, hablamos con él para KienyKe.com sobre todo lo que vivió en esta experiencia.
Apenas aterrizó en el mundo real, La Liendra cuyo nombre real es Mauricio Gómez, expresó: “Pedí pista esta semana para salir de la casa y me la dieron, me dieron permiso de aterrizaje”, si bien este fue un gran avance en su carrera, también lo puso cara a cara con sus emociones, límites y decisiones.
Lea también: El piropazo de Karina a Marcelo Cezán en La casa de los famosos
Desde el inicio, se sintió orgulloso de haber marcado de alguna manera la segunda temporada del programa. “Siento que puse mi sellito”, comentó, pero también fue claro al admitir lo exigente que fue estar allá adentro. No solo por la convivencia, sino por todo lo que implica estar expuesto emocionalmente y bajo la lupa de millones de personas.
“Lo más duro fue controlar el impulso de responder cuando te dicen cosas negativas. No soy de pelear, pero allá todos los días había enfrentamientos”, confesó. Y aunque asegura que los comentarios no le afectaban directamente, sí sentía la presión de que si no reaccionaba, en cámara podía verse como débil. Ese fue su mayor reto: mantenerse fiel a su esencia sin dejarse pasar por encima.
"No me fui derrotado, me fui con dignidad"
Las dinámicas internas de la casa lo llevaron a crear lazos, pero también a marcar distancia con otros. Uno de los grupos con los que nunca logró conectar fue el Cuarto Fuego. “Siempre entendí que eran los contrincantes, entonces para qué meterme en una zona de alto riesgo”, explicó. Aun así, se llevó conexiones genuinas como la que tuvo con El Flaco Solórzano, a quien describió como un padre dentro de 'La Casa', y con Camilo, su gran aliado desde el primer día.
De hecho, su salida no fue solo suya: dejó nominado a Camilo por petición expresa de él. “Me pidió que lo dejara, que ya estaba cansado, que quería irse también. Así que lo hice para que no tuviera que estar rogando votos”, contó.
La experiencia le dejó muchas lecciones, pero una en especial se quedó grabada: “Uno cree que la pelea es con los demás, pero no. Es con uno mismo, con lo que uno piensa, con lo que uno siente. Y si uno se rinde, no es porque el otro te ganó, es porque tú perdiste por dentro”.
Además: ¿A qué se dedicaba Melissa Gate antes de La Casa de los Famosos?
¿Volvería a un reality? Sí, pero no uno de convivencia. “Me animaría a uno de retos, de ejercicio, de otra dinámica. Pero la convivencia como tal… no es para mí”, afirmó, La Liendra.
Ya fuera del juego, La Liendra solo quiere recuperar el tiempo perdido con Dani Duke, su pareja, quien lo apoyó desde afuera incondicionalmente. “Mi noviecita ya me está esperando en el hotel. Quiero saber cómo está, cómo puedo estar ahí para ella”, dijo con ternura.
¿Y sus favoritos para la final? Él lo tiene claro: Emiro, Melissa, Gina y por supuesto, El Flaco. Y antes de despedirse, nos dejó un consejo que vale oro: “Escúchense. Esa vocecita interna siempre tiene la razón”.
Así, con los pies otra vez en tierra firme, La Liendra cierra un capítulo que lo retó, lo sacudió y le dejó una gran enseñanza: la más dura de las batallas, siempre, es con uno mismo.
