Padre Chucho, el milagroso

Mar, 26/11/2013 - 04:15
Es el día 14 del mes. Jesús Hernán Orjuela, conocido como el padre ‘Chucho’, celebrará una misa de sanación frente a una multitud fervorosa. En el interior d
Es el día 14 del mes. Jesús Hernán Orjuela, conocido como el padre ‘Chucho’, celebrará una misa de sanación frente a una multitud fervorosa. En el interior de la parroquia Jesús Amor Misericordioso, ubicada en el barrio Castilla de Bogotá, varias personas lo esperan. Niños, mujeres, hombres y abuelos pagaron 20 mil pesos –el mismo precio que tiene una misa dedicada a un difunto– para que el sacerdote más famoso de Colombia, imponga sus manos, ungidas en óleo, sobre su cabeza. Lea también Al interior de una escuela para exorcistas  Afuera, una multitud que rodea la iglesia espera que el padre ‘Chucho’ suba a una tarima custodiado por un par de hombres que juegan el rol de escoltas. Allí dará una eucaristía desde las cuatro de la tarde y terminará sobre las siete de la noche. Un niño mariachi alabará a la Virgen María con rancheras, la gente hará fila para hacer una ofrenda y algunos darán su testimonio de cambio de vida. Los vendedores ambulantes ofrecerán libros de oración, algunos CD y DVD con la cara del sacerdote en portada, camándulas, botones y todo tipo de objetos religiosos. 'Chucho' predicará, cantará, bailará y atenderá a quienes caigan al piso gritando y babeando. Todos los asistentes van en busca de un milagro. Una faceta poco conocida del religioso que incluso le ha cambiado la vida a varias personalidades del país. Padre Chucho, Kienyke “Hace tres años visité, en compañía de Jota Mario, a Pacheco cuando estaba muriéndose. Milagrosamente sobrevivió. Estaba en una situación muy crítica de salud y mire todo lo que ha durado”, cuenta el sacerdote. También habla del milagro que curó a  la mamá de la periodista de farándula Diva Jessurum. La mejoría de la esposa de un reconocido General de la república ya retirado que padeció cáncer y el caso del humorista Hugo Patiño, quien cuenta el Padre ‘Chucho’ lo ha salvado de la muerte que en dos ocasiones. Pero la sanación más significativa ha sido la de su mamá, quien fue diagnosticada con cáncer de seno e hígado. Hace ocho años, los médicos decidieron operarla en la Clínica Country para retirarle los tumores. Sin embargo, en el quirófano no se encontraron rastro de la enfermedad. Los laboratorios investigaron el caso pero no hubo una respuesta científica. “Dios la sanó un 14 de enero”, recuerda 'Chucho', quien le impuso las manos y oró por ella. Además, confiesa que ha sido la época más difícil de su vida: “eran mis lágrimas, era mi dolor”.  Padre Chucho, Kienyke El padre ‘Chucho’ no sabe cómo explicar cuándo Dios le dice que alguien se va a curar. Solo puede decir que siente algo en el corazón. Aclara que hay cosas raras y cuenta el caso de una mujer que vino de Venezuela con cáncer, pero él no tenía conocimiento. Solo le dijo: “Dios te va a sanar”. Días después le hicieron exámenes y la enfermedad había desaparecido. “No sé cómo pasa eso”, insiste. El humorista Hugo Patiño, conocido como ‘El príncipe de Marulanda’, cuenta que le debe dos milagros al padre Chucho. El primero ocurrió hace unos ocho años. “Como todo viejo me tuvieron que examinar la próstata. Fui al médico y me dijo: hay que hacer una biopsia para ver si tiene cáncer. Si era positivo debían someterme a una cirugía. Uno empieza a temblar de miedo”, cuenta Patiño. Mientras esperaba el resultado no logró conciliar el sueño y perdió el apetito. Padre Chucho, Kienyke “Mi mujer veía al padre Chucho y me dijo: ‘hay un curita que tiene poder de sanación ¿por qué no vamos allá?’. Concretamos una cita y le conté mi problema porque yo me veía dentro de un cajón”. Le impuso las manos, hizo una oración y le dijo: “usted no tiene cáncer”. Tres días antes de tener el resultado de patología, el padre llamó a la casa y le dejó un mensaje a Hugo con su esposa: dígale que vaya al hospital, que no tiene cáncer. Finalmente, decidió comunicarse con su médico, quien le confirmó que estaba libre de cualquier enfermedad. “En agradecimiento yo lo hice compadre de mi hija de 8 años y ahora somos amigos”, dice Patiño. El segundo milagro, asegura Patiño, lo hizo el padre hace cuatro años, cuando le impuso las manos después de haber sufrido una trombosis mesentérica. Los médicos ya habían dado la orden a la familia de adelantar los preparativos de un sepelio. Consiste en que un coágulo bloquea el flujo de sangre en una vena mesentérica, una de las dos venas a través de las cuales la sangre sale del intestino. Estuvo como 15 días en cuidados intensivos. Patiño dice que cada vez que el padre ‘Chucho’ le impuso las manos, sintió un pequeño descanso. Padre Chucho, Kienyke Ha comenzado la misa de sanación. Algunos asistentes pagaron mil pesos de alquiler por una silla de plástico y otros compraron por el mismo valor una botella de agua para bendecirla. Una mujer de edad, quien tiene una enfermedad mental y asiste con frecuencia a la iglesia del padre, pide permiso, sube a la tarima y canta una canción con entusiasmo. Todo se le permite, acaso porque está segura de ser la Virgen María. Continúa la celebración y durante la primera oración una mujer cae al piso. Grita y escupe sin control. Los encargados de logística le piden a la gente que no la toque. Pasan unos minutos antes de que el padre se acerque a la mujer para levantarla. Lea También La ira santa del Monseñor de Monserrate Según el sacerdote, cuando le impone las manos a los enfermos, ellos pueden sentir calor, angustia, tristeza o liberación. En casos en que la cabeza pierde su firmeza, explica que es como si la persona estuviera pasando por una cuerda floja y, de repente, alguien la atrapara. “Ese es el espíritu de Dios obrando”, dice, porque él insiste en que no es milagrero ni hace milagros.“Hay personas que hasta me odiaban y, por haber sanado a su abuelita, ahora me aman". 
Más KienyKe
Conozca la historia de Sebastián Salazar, el futbolista que habría terminado su relación con Marbelle.
Luego de las fuertes críticas que recibió por las claras opciones que desperdició ante Ecuador, Jhon Córdoba tomó una drástica decisión.
Conozca la fecha y hora dónde se podrá ver la gran final de la Copa Sudamericana entre Racing y Cruzeiro en Colombia.
La situación de ICETEX refleja una compleja interacción entre las limitaciones presupuestarias del país, las prioridades políticas del Ministerio de Educación y la necesidad de asegurar el acceso a la educación para los jóvenes colombianos.
Kien Opina