"Estoy feliz porque ‘Ruiseñora’ es mi tercer disco solista. Es muy importante porque yo lo produje y lo toqué, en un proceso de independizarme y hacer las cosas por mí misma. El disco tiene mucho de género y lo asumo como mi liberación femenina. Admito que también es antimachista.
Definitivamente la liberación femenina es un proceso inacabado, del cual hay que hablar. Últimamente uno dice que es feminista y lo miran rayado. Estamos en un país absolutamente machista donde todo el tiempo se maltrata a la mujer y hay maltrato intrafamiliar, hay violaciones de mujeres todo el tiempo. También somos el botín de guerra. En la ciudad somos las protagonistas de todo un mecanismo publicitario horroroso.
La mujer está en un lugar muy extraño, definitivamente hemos conquistado algunos espacios pero la lucha está delante de nosotras y hay que asumirla.
Sobre Aterciopelados les cuento que Héctor Buitrago ha escrito por ahí en las redes sociales que nos volvemos a juntar en el 2015. Me parece muy chévere, después de una larga separación donde cada uno probó proyectos solistas. Regresaremos seguramente renovados, reforzados.
Si me pregunta por la edad, le digo que ya no soy peladita de antes y estoy orgullosa. Me parece horrible que en esta sociedad nadie tenga canas ni arrugas. Como que nadie es sabio, como que ya no hay nadie que sumercé diga ‘ah bueno ella sabe’, ¿no?
Me parece chévere estar grandecita y saber una que otra cosita.
Por ejemplo que esto de la música se ha vuelto complicadito. Hay menos billetes en el mundo del disco, lo que obliga a ser más recursivo. Este disco yo lo toqué, yo lo manejé, fue un año de trabajo duro, una manera de encarar la crisis porque sumercé ya no se puede pagar un estudio.
Lo mismo pasa con la distribución, si sumerce no tiene atrás una gran disquera entonces la gente se entera y ayuda a construir una red de gente que se sintoniza con sus ideas. Alrededor de mi nuevo trabajo hay un chiste. Mi disquera se llama “soyla-discos”.
Edgar Artunduaga: Yo me imaginaba que Andrea Echeverry ya había conseguido dinero, que era millonaria, además de famosa…
Andrea Echeverri: Como Shakira, sí o qué.
Creo que ella como desde los doce quería ser artista, cuando uno no tiene claros los conceptos. De alguna manera siguió los pasos de Madonna o algo así, ¿sí o qué? Ese tipo de artista no me gusta… esa chica que utiliza su cuerpo y energía sexual y que mezcla con la energía musical… por ahí yo sí no voy… pero funciona. Y le ha ido súper bien.
A mí me ha ido bien de una manera diferente. Yo estudié arte y empecé a hacer música como a los 25, habiendo leído ya a Simone de Bauvoir y a Virginia Woolf, ya sabía que subirme al escenario era otra cosa. He sido respetuosa de la energía femenina y no he dejado de ser chica y de ponerme vestidos chéveres y tener un lenguaje corporal, pero siempre respetuosa. Eso me parece que es una diferencia enorme.
Definitivamente Shakira tiene más ceros en su cuenta pero yo tengo una casa súper bonita, tengo carro… tampoco es que ande súper pelada, estoy en la lucha como llaman y creo que he llegado a un momento de madurez a independencia artística.
¿Critica usted el bajo nivel cultural y educativo de Shakira?
Como puedo criticar a alguien si yo hablo como pura ñera. Lo que critico es lo otro, es la comercialización del cuerpo. El movimiento de caderas no, si yo las muevo súper bien, aunque ese no es centro de mi trabajo.
A mí me gusta bailar y me propongo hacerlo más, pero no con la intención de “todos muéranse por mí”. No.
¿Y a nivel emocional todo le funciona bien?
Pues no tanto. Estoy en la crisis de la mediana edad.
¿Qué quiere decir eso de la crisis de la mediana edad?
Yo no sé pero yo lo he escuchado mucho. Es como una agite raro. Como que no se halla uno. A mí me mantiene a flote la música y la cerámica.
¿La media naranja anda perdida?
Hay conflictos, dejémoslo así.
“Me parece horrible que en esta sociedad nadie tenga canas ni arrugas”
Vie, 08/03/2013 - 10:00
"Estoy feliz porque ‘Ruiseñora’ es mi tercer disco solista. Es muy importante porque yo lo produje y lo toqué, en un proceso de independizarme y hacer las cosas por mí misma. El disco tiene