En Santiago de Chile las temperatura a mitad de año empiezan a descender. El frío del cono sur se siente fuerte entre la ciudadanía y este año, en medio de la pandemia por el coronavirus, el ambiente luce más apagado e incierto.
Justo a las afueras del consulado de Colombia en la capital chilena se encuentran decenas de carpas y tiendas improvisadas que armaron 92 connacionales que se quedaron atrapados en ese país y no tienen cómo pagar un techo para vivir mientras son repatriados.
Con una voz que tiritaba por el aire helado en el ambiente, Sandra Nieves, una turista colombiana que viajó a Chile con su hijo de 20 años el pasado 7 de febrero, le contó a Kienyke.com la situación compleja que están viviendo y la angustia de no saber cuándo regresarán al país.
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En una calle que se ubica justo al lado del Consulado de Colombia en Santiago, estos 92 colombianos llegaron hace 21 días. Con mantas, cobijas y algunas carpas armaron un especie de cambuches para exigir la repatriación.
“Para la comida llegan muchas ayudad. Gracias a Dios hay muchas personas que viven aquí en Chile nos llevan comida. También nos compartes frazadas y cobijas”, comentó la colombiana.
Con tantos días en ese lugar, a la intemperie, Sandra comentó que para atender las necesidades del cuerpo, hicieron un baño de cartón y otras personas han ido a edificios cercanos para que les presten los baños.
La turista comentó que hay otro grupo de colombianos que se está formando muy cerca de ellos están y cuenta que hay bastantes personas en el lugar, lo que hace que las medidas de distanciamiento para evitar el contagio del Covid-19 sea imposible.
“El frío va hacer insoportable, el frío es terrible, hay niños y bebés y es algo inhumano que pase esto”, indicó Sandra Nieves.
"Cuando iba a regresar a Colombia llegó la pandemia"
Esta mujer es de Armenia, tiene dos pequeños hijos, un niño de 3 y una niña de 12 años. Los dejó con su mamá pero con las dificultades de la pandemia y al ser una mujer de la tercera edad, una vecina los está cuidando.
Sandra junto a su hijo de 20 años llegaron a Santiago de Chile para conocer la ciudad, era un vieja de unos 15 o 20 días, pero cuando ya debían regresar el virus se les adelantó y los vuelos comenzaron a postergarse hasta que cerraron los aeropuertos.
“Mi hija me llama y llora porque me quiere ver. Yo he llorado delante del cónsul David Camilo Salgado para que me ayude porque él sabe de mi situación, pero no pasa nada. Estoy apunto de enloquecer”, relata con gran dolor esta connacional.
La situación es tan desesperante que Sandra admite que ha pensado en irse caminando hasta alguna frontera, pero es consciente que la distancia que tendrá que recorrer es de 6.729 kilómetros, imposible.
Por medio del correo no me ha llegado nada. He preguntado y me dijeron que vuelos para este mes y para el otro no habían.
“Lo único que queremos es ser repatriados, que el Gobierno se ponga la mano en el corazón porque aquí la estamos pasando muy mal. El cónsul Camilo sabe cómo estamos viviendo aquí”, contó Sandra.
Estamos en la calle y nuestras familias también sufren, somos colombianos por favor que nos ayuden.
La respuesta de la Cancillería
Este medio consiguió la versión de la Cancillería de Colombia sobre la situación de este cambuche que está instalado a las afueras del consulado en Santiago de Chile.
Según la entidad, desde ese Consulado han trabajado para que estos colombianos que quedaron atrapados en ese país puedan instalarse de manera temporal en un albergue que queda ubicado a 10 cuadras de donde están acampanado.
Como en chile hay restricción las personas no se puede mover libremente se pidió ayuda de los carabineros para que pudieran trasladarse.
“Los colombianos no aceptaron esa ayuda. Se les consiguió albergue donde dormir todas la condiciones de una casa, transporte para llevarlos y no lo aceptaron”, contó la Cancillería.
Frente a que no recibieron las ayudas, Sandra comentó que no lo han hecho porque las dan por 8 días y luego “nos sacan a la calle”.
“En mi caso me ofrecieron estadía y un bono de 7.000 pesos chilenos (unos 32.000 pesos colombianos) para come. Eso me dijeron hace 8 días y hasta ahora no ha llegado nada”, comentó Sandra.
Según la Cancillería en este tema hay un abogado que estaría asesorando a estas 92 personas y quien al parecer les estaría aconsejando no recibir las ayudas.
Sandra confirmó que sí tienen un abogado colombiano y que con él ya lograron instaurar una tutela para que fueran repatriados. “La tutela la tiene el abogado Carlos Arango, él es colombiano. Por el momento está en proceso”, comentó.
Pero asimismo dijo que si no reciben las ayudas es porque no son constantes y no cumplen. Y que nadie los está asesorando para rechazar las ayudas del Consulado.
“Las personas que están acampando ya están en las listas para viajar. Pero hay prioridad para las personas que tienen urgencia humanitaria”.
Sandra Nieves ya va para 4 meses en Chile, aquí en Colombia ya perdió su trabajo y tiene el dinero suficiente para pagar el tiquete de regreso al país. Dormir a la intemperie preocupa más con las bajas temperatura de las noche en Santiago.
Se le oye muy preocupada, está lejos de su familia y la situación del coronavirus parece que complica tanto en Chile como en Colombia. Los contagios aumentan cada día y ella solo espera llegar a casa y proteger a su madre e hijos, en su tierra.
