Falsas promociones, sorteos, premios, solicitudes de información bancaria, entre otros son algunos de los métodos que quienes se dedican al mundo de los ciberataques utilizan para infiltrarse en la red de una empresa y conseguir extraer información valiosa para estafas, desvíos de fondos y hasta sustracción de gigantescas bases de datos para su ilícita comercialización.
Según cifras de la Fiscalía General de la Nación, la suplantación de sitios web es el segundo método más usado, con un incremento del 29%, para capturar datos personales. Los ciber-delincuentes operan bajo enlaces maliciosos para la difusión de códigos dañinos, que bien puede presentarse a través de ‘phishing’, ‘smishing’, o ‘pharming’.
En la encuesta CyberArk que se realiza a 1.300 profesionales de TI, se descubrió que el 53% de las organizaciones identificaron al phishing como su mayor riesgo de seguridad informática. Por otro lado, según analistas de la organización TechTarget, El 71% de las empresas de Latinoamérica no cuenta con expertos en ciberseguridad y para el 2024 se requerirá 10 millones de profesionales de ciberseguridad para controlar la cantidad de ataques.
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Para Esteban Lubesnky, presidente ejecutivo de GMS, compañía líder en seguridad de la información en Latinoamérica, el teletrabajo es uno de los factores que está generando vacíos de seguridad en las empresas: “los riesgos se incrementaron cuando los trabajadores no disponen de equipos cuyo uso exclusivo es para responsabilidades del trabajo, sino que incluso, un ordenador puede ser utilizado por otros miembros de la familia; entonces el control sobre el acceso a la red se vuelve aún más complicado”.
Según datos de GMS, el negocio delictivo del hackeo puede ser un negocio mil veces más rentable incluso que el narcotráfico, por lo que recomiendan a las empresas crear una conciencia colectiva respecto a los perjuicios que pueden significar, más allá de su negocio: “no se trata solamente de soluciones tecnológicas, sino de crear conciencia dentro de la organización y que todos sepan cómo actuar frente a un ataque”, afirmó Lubesnky.
Según estudios estadísticos de Darktrace y Computer World Ekos, el 94% de las ciberamenazas se originan por correo electrónico y el 2021 cerrará con un costo global por cibercrimen de más de 6 billones de dólares. Entretanto, el próximo 21 de octubre, centenas de expertos en seguridad informática de las empresas más reconocidas de Ecuador, Colombia y Perú (GSM) se darán cita para dialogar sobre las nuevas tendencias y la constante innovación a la que se enfrenta la industria de cara al 2022.