Otro inconveniente más para Colombia y América Latina con Estados Unidos, tras anunció de posible cierre de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), ya que, esta entidad financia diversos proyectos sociales en países del sur.
Tras diversos anuncios, el día de hoy lunes 3 de febrero, se le habría indicado a los trabajadores de dicha entidad que no se presentaran a sus puestos de trabajo ante el posible cese de operaciones. Esto después de que el magnate y asesor de Eficiencia Gubernamental, Elon Musk, acordará con el presidente Donald Trump el cierre de la Agencia.
Luego de esto, se habría identificado que por lo menos 600 trabajadores de la entidad de desarrollo no habrían asistido hoy a trabajar, por cuenta de una expulsión del sistema informático en la noche del pasado domingo.
Ante esto, Elon Musk, ha calificado a la Agencia como “Una organización criminal”, acompañado del presidente Donald Trump quien poco después diría que: “Está dirigida por lunáticos radicales “, por lo que estaría reconsiderando su futuro.
“Ha sido dirigida por un puñado de lunáticos radicales, y vamos a sacarlos. Entonces tomaremos la decisión (sobre el futuro de la entidad)”, aseguró el mandatario, que no daría más detalles sobre el plan que tiene con esta Agencia.
Esta posible medida de cierre, viene acompañada de la decisión que tomó el presidente estadounidense el mismo día de su posesión, la cual se basó en frenar las ayudas económicas a diversos países, incluido Colombia.
Por otra parte, el magnate mano derecha de Trump, Elon Musk, ha señalado que la organización es una “entidad criminal”, luego de que respondiera a un video donde indicaría que la Agencia había estado involucrada en “trabajos sucios de la CIA” y trabajando en “censura de internet”, señaló el empresario sudafricano.
¿Cuál es el impacto para Colombia?
Diversos factores terminan derivando en consecuencias negativas para la ONG en Colombia. Ya que, como se ha visto desde el posicionamiento de Donald Trump en la Casa Blanca, su primera orden fue congelar recursos económicos por 90 días, hasta determinar si esto es necesario o si en definitiva no se vuelven a girar al país.
Esta importante decisión deja en un entredicho a las organizaciones sociales del país, porque ahora deben afrontar la disyuntiva sobre si deben continuar con sus operaciones y ayudas a las poblaciones vulnerables. O si por el contrario, el presupuesto no les alcanza para asegurar una sostenibilidad financiera.
En el ejemplo del año 2024, Colombia recibió un 70,6% de la financiación humanitaria proveniente de Estados Unidos. Algo que ha generado dependencia a los recursos norteamericanos para los proyectos sociales y de apoyo a las poblaciones más necesitadas de la nación.
Además, organizaciones desprendidas de los acuerdos de paz que se realizaron con la extinta guerrilla de las FARC en el 2016, como la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), están viendo como los fondos que estaban previstos, ya no les llegarán, lo que puede desencadenar en que los diálogos implementados no puedan seguir como una prioridad o incluso tengan que frenar.
El golpe de esta decisión, que dicho sea de paso no tiene nada que ver con las tensiones recientes entre ambos gobiernos, ya que fue una decisión que tomó Trump desde su primer día en el mandato, están afectando negativamente los procesos de paz y las ayudas sociales instauradas en el país, las cuales han sido el foco central del Gobierno de Gustavo Petro.