Algunas partes de los vehículos no son para siempre. Por lo general, a medida que el auto va ganando kilómetros, sus neumáticos, el aceite, las pastas de los frenos e incluso la batería le piden un cambio.
Sobre el último ítem, hay que destacar que no cualquier batería es la indicada para su auto. No importa si es económica o costosa, pero siempre hay que fijarse en el tipo que se compre, porque puede terminar adquiriendo una fuente de energía no compatible con su coche.
Por eso, lo primero que se debe tener en cuenta es que existen cinco tipos de baterías, que son la de celdas húmedas, la de calcio, VRLA, ciclo profundo y de iones de litio. Las más comunes de estas son las dos primeras, que son depósitos totalmente cerrados y que su duración es larga, además, son las más económicas, especialmente para los vehículos clase media.
[single-related post_id="976952"]
Pese a que algunas fuentes de poder son similares, no todas son compatibles con su vehículo. Luego de reconocer la batería, tiene que revisar lo más importante: el amperaje, que es la cantidad de corriente que puede suministrar la pila por los sistemas eléctricos del vehículo.
Hay que tener en cuenta que utilizar una batería con un amperaje menor al especificado por el fabricante del vehículo ocasionará problemas en la partida del motor y dañará el acumulador.El nivel de amperaje se puede ver en la etiqueta de la batería, por lo que no requiere de un técnico para saber cuál necesita en ese aspecto. Por su parte, también es importante saber cuál es la posición de los polos de la batería, ya que no todos son iguales. Aquí lo que se debe hacer es que, al momento de cambiar su pila, esté seguro que tenga los mismos polos para que los cables del vehículo encajen perfectamente. Cabe resaltar que para saber cuánto le queda de vida útil a la batería, puede acercarse a un centro eléctrico y allí se le hace la revisión pertinente, aunque también puede revisar su fuente de energía, ya que algunas tienen unos indicadores con colores verde, blanco y negro, que le indican si está buena, si le queda poca vida o si por el contrario, ya debe ser reemplazada.