Gracias a las cámaras de seguridad quedó en evidencia una nueva modalidad de robo que se ha repetido en otros barrios de la ciudad, el asalto masivo de atracadores a personas indefensas en las calles.
El nuevo hecho ocurrió en la localidad de Engativá el pasado 3 de febrero. Sobre las cuatro de la mañana se aprecian dos motos, ocupadas por dos pasajeros cada una, que van a baja velocidad observando atentamente las calles solitarias del barrio.
En una de esas calles ven a un ciclista y tras unos segundos, se devuelven y lo abordan. De la primera motocicleta en llegar se baja el pasajero e inicia el forcejeo con la víctima, la cual trata de alejarse a pie, con la bicicleta en la mano, cuando llega la otra motocicleta de la que se baja otro ratero que rápidamente abraza al ciclista para hurtarle sus pertenencias.
El hombre decide ceder ante los ladrones y estos lo requisan en todo el cuerpo rápidamente. En un momento, uno de los pillos le entrega al que sostiene a la víctima lo que aparenta ser una navaja y se dispone a pinchar la llanta delantera de la bicicleta.
A pesar de que el ciclista continúa cediendo al hurto, uno de los criminales lo golpea y lo tira al suelo, donde los ladrones continúan con una incesante requisa. Lo arrastran por el piso y lo obligan a acostarse en el andés y continúan el escrutinio de toda su ropa.
Mientras esto ocurre durante más de un minuto, las motos continúan merodeando la avenida para avisar a sus compinches de la Policía o más personas, pero la calle está desierta, nadie acude en ayuda de la víctima.
Luego de un minuto y medio de asalto, los cacos sueltan a la víctima y las motocicletas se acomodan para emprender la huida, uno de los rateros toma a la víctima de la chaqueta y le propina un golpe en el rostro antes de correr hacia el vehículo.
El ciclista queda desconcertado y se recompone para acomodarse la ropa y recoger las pocas cosas que dejaron los delincuentes en el piso. Toma sus gafas, se abotona la chaqueta y recoge la maleta.
Durante el 2020 la percepción de inseguridad en Bogotá aumentó 16 puntos porcentuales y alcanzó el 76% de desconfianza por parte de los ciudadanos, misma cifra de hace cinco años, pese a que según la Secretaría de Seguridad el hurto a personas se redujo en un 36% con respecto al año 2019.
La alcaldesa Claudia López solicitó este martes 9 de febrero al Gobierno Nacional el cumplimiento del número de policías para la ciudad, el cual, según dijo, se había acordado en 2.000 uniformados nuevos para la capital, de los cuales dijo que solo han llegado 400.
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Así mismo, el director de la Policía Nacional aseguró que entre 2021 y 2022 se incorporarán 1.500 policías más al pie de fuerza de Bogotá, más 955 que habían llegado a la capital en 2020.
