La alcaldesa Claudia López participó de un Consejo de Gobierno en la localidad de Bosa, allí expresó lo que encontró en su recorrido por la localidad y escuchó algunas problemáticas que tienen los ciudadanos del sector.
Uno de los jóvenes que asistió al Consejo le pidió acciones para frenar presuntos abusos sistemáticos por parte de la fuerza pública en contra de los jóvenes de Bogotá, narró lo que le sucedió en las protestas del 9 y 10 de septiembre y criticó las formas en las que opera la Policía.
"Fui agredido, golpeado, incluso hay videos en donde se ve como me captura la Policía brutalmente, me dispararon con una pistola táser... tengo todavía una cicatriz de esos hechos, conmigo había más de 30 jóvenes, ¿Hasta dónde está llegando la limitación del la fuerza pública con los jóvenes?", manifestó.
Ante ese contundente testimonio la alcaldesa aseguró que las investigaciones por esos casos no han parado y que desde la Alcaldía están comprometidos particularmente con el esclarecimiento de las muertes violentas durante dichas manifestaciones desencadenadas por la muerte de Javier Ordóñez.
"Tengan la plena seguridad de que no nos vamos a ir de esta Alcaldía hasta que no se judicialicen a los que mataron a nuestros jóvenes el 9 y 10 de septiembre", afirmó la alcaldesa Claudia López.
La mandataria de Bogotá señaló que desde la Secretaría de Seguridad se deben hacer mesas de trabajo y de concertación entre los jóvenes y la Policía para reconocer dichos conflictos y aliviar las tensiones que puedan existir.
"Nosotros fuimos los primeros que pusimos las denuncias, por ahora no tenemos mayores datos, claro ha pasado poco tiempo y es una investigación difícil, pero ahí vamos a estar y esperando resultados para que se tomen medidas", sentenció la mandataria.
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Frente a esa afirmación, el secretario de Seguridad Hugo Acero, indicó que ya se identificaron los puntos de la ciudad en donde se presentan con mayor regularidad estos casos y gracias a eso ya se adelantan programas de diálogo con los jóvenes.
"No es solamente reconstruir los CAI, es reconstruir la confianza, el tejido social y la convivencia, la única manera para hacer eso es trabajar con toda la comunidad", expresó Acero.
Vale la pena recordar que, en las protestas de septiembre 305 civiles resultaron heridos, 75 de ellos por arma de fuego, 10 personas perdieron la vida, 9 por heridas con arma de fuego y una mujer falleció luego de ser atropellada por un grupo de vándalos que robó un bus del SITP. Además, 216 uniformados de la Policía fueron heridos, 4 de ellos por arma de fuego.
La Fiscalía General de la Nación, La Policía Nacional de Colombia y la Procuraduría General de la Nación tienen a cargo las investigaciones más grandes sobre las noches violentas que vivieron los habitantes de Bogotá durante el 9 y 10 de septiembre.
