Los mensajes desaparecen y las llamadas sólo quedan en recuerdos, el 'Ghosting' es conocido como una de las peores maneras de terminar una relación. En inglés la palabra se deriva de 'ghost', que significa fantasma.
El sexólogo de la Universidad de Barcelona Fernando Rosero, afirma que esta nueva era de relaciones en las que se incluye la tecnología, ha marcado inevitablemente un componente importante en la forma de interactuar. Tener Internet como fuente de las relaciones sentimentales, no provoca más que una manera de generar intimidad con mayor frecuencia. Sin embargo, no se genera un vínculo real, "así como llega rápido esa relación, también se pierde frente a la estabilidad de los lazos".
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La globalización es una de las principales causas de las nuevas maneras de relacionarse, la distancia y la falta de tiempo hace que las personas busquen alternativas para mantener sus relaciones sentimentales sin tener que invertir horas o dinero en compartir con otras personas. No obstante, las débiles bases sobre las que están fundamentadas este tipo de relaciones hace que exista una alta posibilidad de que terminen en la brevedad del tiempo.
Es en ese momento cuando la práctica a la vanguardia de la tecnología empieza a tener nombre propio, es allí cuando surge el 'ghosting' o hacerse el fantasma. Desaparecer repentinamente trae consecuencias tanto para la víctima como para el victimario. Entre los efectos está la falta de autoestima o remordimiento constante. La facilidad que brinda Internet hace que las personas pierdan consciencia del daño que causa desaparece repentinamente de la vida de alguien más.
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Los expertos afirman que muchas de las personas que practican esta manera de terminar relaciones, realmente le temen al conflicto y ven en el ghosting una forma fácil y rápida de acabar con una situación que les puede resultar incómoda.
"En la vida real no es posible deshacerse de las personas con un clic", es por eso que el ghosting es una práctica propia del ciberespacio, donde basta con un clic para desaparecer a alguien.
