Quizás, alguna vez haya experimentado la sensación de despertar por un brinco involuntario de su cuerpo. Aunque no le pase a todo el mundo si existe un gran porcentaje de la población que lo ha vivido al menos en una ocasión.
La mayoría de veces, la sensación se experimenta cuando apenas se está quedando dormido. Se le llama sacudidas hípnicas, a los movimientos espontáneos, que se producen durante la vigilia y el sueño.
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Aunque sea un impulso que en muchas ocasiones pase desapercibido, toda acción y/o respuesta del cuerpo, tiene como origen un estímulo físico o mental que se traduce en cosas como los brincos en medio de la siesta.
El ciclo vigilia-sueño, es básicamente el proceso que se realiza al interior del cuerpo para desactivar el estado de alerta que no estará presente durante el sueño.
Normalmente, estos brincos se perciben en las extremidades, sobre todo en las piernas, que dan un salto tan fuerte que hasta logran despertarlo de nuevo.
Una sólida hipótesis originada en un estudio de la Universidad de Colorado, apunta a que esa reacción se debe una mala interpretación del cerebro, ante la extrema relajación del cuerpo al momento de dormir. En este caso, el sacudón puede ir acompañado de una alucinación de caer de un edificio, un árbol u otro sitio con altura.
La enfermedad del siglo XXI, es decir, el estrés, según otra teoría, también puede ser el motivo por el cual el cuerpo brinca cuando se está en medio del sueño. Este, también acompañado de otras condiciones como la ansiedad, la fatiga, falta de sueño y cantidad de cafeína que consume a diario, podría aumentar la frecuencia de los tirones.
A pesar de que los estudios en torno al tema, confirman que el 70% de las personas viven a menudo dicha situación y que todas las personas tienen la posibilidad de experimentar un brinco de este alguna vez, no existe ningún significado clínico negativo.
Para algunos hipocondriacos, puede resultar temeroso el hecho de que su cuerpo salte de forma brusca en medio del sueño y lo despierte confundido. Sin embargo, no hay nada que arroje un resultado preocupante mientras sea con normalidad.
Se debe buscar ayuda clínica cuando estos saltos nocturnos vayan acompañados de otras situaciones que le provoquen un trastorno en el sueño.
La conducta de sincronizada durante el sueño, por ejemplo, es una condición que básicamente representa físicamente los sueños que se están viviendo mientras duerme. Ocurre, según estudios, en la segunda mitad de la noche e interpreta el 20% del sueño.
En un principio, pueden ser pequeños sonidos vocales, movimientos leves de los brazos o las piernas. Sin embargo, con el tiempo dichas reacciones pueden ir empeorando en su fuerza y constancia, por lo que, acompañado de los brincos o saltos en medio del sueño, si sería motivo de consulta con un médico.
Aunque se hayan hecho algunos estudios al respecto, los tirones que interrumpen el descanso nocturno, siguen teniendo cierto misterio. La escases de literatura científica alrededor del hecho, hace que distintas teorías le den otras explicaciones .
Hay alguna que, por ejemplo, habla de una perspectiva imaginaria desde la parte evolutiva, donde el cerebro representaría con los saltos, un reflejo vestigial de cuando los humanos eran primates y dormían en las ramas. Sin embargo, esto no ha tomado fuerza y tampoco ha sido comprobado.
