Desde que se conoció la decisión de instalar un nuevo peaje en el municipio de Luruaco, Atlántico, tanto la comunidad como la Alcaldía Municipal rechazaron la idea. Aunque en días pasados el presidente de la ANI, Manuel Felipe Gutiérrez, dijo que ya no se haría la instalación, el Ministerio de Transporte lo contradijo y revivió la polémica.
El pasado jueves la ministra de Transporte, Angela María Orozco, señaló que el proyecto del peaje en Arroyo de Piedra, corregimiento de Luruaco, está autorizado pero es posible que más adelante se lleve a cabo un debate y se analice el tema.
Además, dijo que existe la posibilidad de crear una tarifa diferencial para no afectar la economía de los pobladores de la zona. Esa misma modalidad se ha establecido en Puerto Colombia y Baranoa.
El peaje se instalaría en la vía La Cordialidad, una carretera nacional que comunica a las ciudades de Barranquilla, en el Atlántico y Cartagena en el departamento de Bolívar. Esa instalación estaría a cargo de la concesión Ruta Caribe 2, que asumirá el mantenimiento de la vía desde el año 2022.
Al parecer, el pago de este peaje sería de 8.126 pesos en el caso de los vehículos categoría uno.
Cabe recordar que en una reunión reciente que se llevó a cabo en Barranquilla, la viceministra de Infraestructura, Olga Lucía Ramírez, señaló que los peajes son necesarios para poder desarrollar obras de infraestructura en el país. Con esa declaración también afirmó que "se van a respetar los contratos de concesión existentes donde hay algunos peajes a instalar. No van a haber peajes nuevos para las concesiones nuevas".
Población y Alcaldía en desacuerdo
La instalación de una caseta para el cobro de peaje en el corregimiento Arroyo de Piedra, jurisdicción de Luruaco, afectaría la economía de los pobladores de esa zona del país, según han alegado algunos habitantes del sector y la misma alcaldesa Marly Gutiérrez.
En días pasados la alcaldesa de Luruaco, Marly Gutiérrez, indicó que una de las razones para rechazar la instalación de esta caseta en el municipio "es que eso afectará el bolsillo de los luruaqueros de manera directa. No podríamos ir nosotros a Barranquilla porque nos colocan un peaje dentro de nuestra jurisdicción; los campesinos se ven afectados porque para poder trasladar sus productos a las plazas principales tendrían que pagar más flete", según citó el medio local El Universal.
Además, indicó que ese nuevo cobro afectaría el proceso de reactivación económica y turística que se viene adelantando en el municipio.