Pese a las críticas y oposición de un sector político del Putumayo, hoy la empresa Libero Cobre está comprometida con la generación de empleo y la creación de capacidades locales: actualmente emplea a 110 personas, el 85% de ellas oriundas de Mocoa y Putumayo, y genera alrededor de 350 empleos indirectos entre contratistas y proveedores de la región, fabricando todo local, incluso las primeras botas de seguridad hechas en Mocoa, Putumayo.
Con la explotación del cobre, se pone en marcha la iniciativa Alianza "Ruta Verde" posicionará a Putumayo y Colombia para que por primera vez en la historia produzcan sistemas de energía y tecnologías limpias a partir del cobre, lo que ayudará a diversificar la economía regional y la del país y a reducir la dependencia de importaciones en este sector.
Y es que, según el informe técnico sobre el Proyecto de Cobre y Molibdeno Mocoa, se estima que hay más de dos millones de toneladas métricas de cobre en Mocoa. Esto posiciona a Colombia como un potencial proveedor de cobre en un momento en que se espera un déficit mundial de cobre para cumplir con las metas ambientales y de generación de empleo.
Lea también: Putumayo convertiría a Colombia en uno de los principales productores de cobre
El Proyecto Mocoa está ubicado en la cordillera de los Andes, en el llamado Cinturón de Cobre de los Andes, donde se ubican los principales proyectos cupríferos del Mundo en los países vecinos de Chile, Perú y Ecuador. El Proyecto está ubicado fuera de la captación de los acueductos que surten la población de Mocoa, no está habitada por comunidades y se encuentra en zona de bosque intervenido.
Además, los estudios no están enfocados en producir concentrado de minerales de cobre para exportación sino en la transformación de estos minerales a cobre metálico en el país. Actualmente la empresa está desarrollando estudios junto a la Universidad Nacional de Colombia.
La producción inicial, pensada para el Proyecto Mocoa se encuentra entre las 10.000 a 20.000 toneladas métricas por año de cátodo de cobre. Aunque estos niveles de producción están muy por debajo del potencial del yacimiento y podrían mantenerse durante décadas o incluso cientos de años, los niveles de producción están enfocados en abastecer una cadena de producción nacional en crecimiento.
Esto permitirá contar con la materia prima nacional necesaria para consolidar el primer Complejo Industrial de Cobre en el país y la ampliación de la cadena iniciada en la Alianza Ruta Verde.
Cobre, el ingrediente que hace falta para liderar la transición energética en Colombia
El cobre, conocido como “el metal verde” debido a su importancia para la transición energética, es uno de los minerales más apetecidos del siglo XXI ya que es vital para las nuevas tecnologías, desde automóviles eléctricos hasta energías renovables. Su alta demanda implicaría que el tamaño del mercado se multiplique casi por siete para 2030, según indica la AEI (La Agencia Internacional de Energía).
Le puede interesar: Explotación del cobre, ¿La llave para el desarrollo del Putumayo?
Además de apoyar al sector de las energías renovables, el cobre juega un papel importante en la infraestructura, como material de construcción, y en la industria automotriz. Según las últimas cifras de la Agencia Internacional de Energía (IEA), hay aproximadamente 2.5 veces más cobre en un vehículo eléctrico que en un automóvil convencional. Su doble funcionalidad, como mejor conductor de calor y electricidad, contribuye a los objetivos globales de reducción del consumo de energía, mejora del rendimiento de los equipos eléctricos y reducción de las emisiones de CO2.
La demanda de cobre solo para la transición energética seguirá creciendo a nivel mundial, Goldman Sachs predice que para 2030, crecerá casi un 600% a 5,4 millones de toneladas, solamente por la transición energética.
El gran problema radica en que, actualmente, el mundo no produce suficiente cobre para satisfacer la demanda, lo que sugiere una escasez a mediano plazo.
Colombia podría convertirse en productor de cobre y exportador de productos para la transición energética
El Gobierno del Cambio del presidente Gustavo Petro ha reiterado su compromiso de “transitar a una economía sin carbón y sin petróleo” para apostarle a las energías limpias por medio de la transición energética, aportando así a la mitigación del cambio climático en una crisis ambiental global que es urgente.
Además: Piden Investigar representante a la Cámara del Pacto Histórico en Putumayo
Debido a la escasez de cobre en el planeta, los países con reservas probadas y potenciales de este metal verde, como Colombia, desempeñarán un papel estratégico a medida que cambien los patrones de consumo de energía en el mundo.
La Agencia Internacional de Energía predice que la energía eólica y solar podrían representar el 70 % de la generación de energía para 2050, frente al 9 % en 2020, si el mundo de verdad actúa para neutralizar las emisiones de carbono en 2050.
Según la Agencia Nacional de Minería, “el cobre reemplazará al carbón como la exportación minera estrella de Colombia, considerando importantes depósitos probados en regiones como Putumayo, Córdoba, Chocó, Nariño, Antioquia y la región nororiental”.