El encuentro entre el expresidente Álvaro Uribe Vélez y Francisco De Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, causó revuelo en el país por las declaraciones del líder del Centro Democrático sobre los 62 temas que se trataron. Entre ellos, su propuesta de implementar una amnistía general.
El expresidente señaló que se debería discutir una amnistía general para resolver el desequilibrio judicial, en el que algunas personas pagan largas condenas y otras siguen libres o reciben sentencias menores pese a la gravedad de sus delitos.
Uribe tomó como ejemplo el caso de la influenciadora Daneidy Barrera Rojas, más conocida como Epa Colombia, quien fue condenada a 63 meses de prisión al ser hallada responsable del delito de daño en bien ajeno agravado en concurso heterogéneo con instigación a delinquir con fines terroristas y en concurso heterogéneo con perturbación en servicio de transporte público, por los daños a TransMilenio en 2019.
"Anoche veía yo en un programa, con la niña ‘Epa Colombia’, y volvían a comparar con el ladrón de bicicletas, una cosa y la otra. A mí me parece grave lo que esa niña hizo y, no la conozco y no la quiero juzgar, de darle con un martillo a Transmilenio. Pero también decían: ‘¿Por qué estos violadores de niños ni un día de cárcel y esta niña condenada?’ Este país de pronto va a necesitar una amnistía general, casi que un borrón y cuenta nueva", sostuvo Uribe.
El exmandatario colombiano recordó los comentarios que suscitaron las condenas a los paramilitares que se desmovilizaron durante su Gobierno para cuestionar el Acuerdo de Paz por no imponer penas a los guerrilleros que se acogieron a dicho proceso.
"A mí me criticaban mucho, me decían es que 8 años de cárcel a los paramilitares es muy poquito, 5 u 8 años, y mis críticos tenían razón, pero lo que pasa es que por el sesgo político cuando se llegó a lo de las Farc dijeron no hay cárcel. Yo creo que eso es muy desbalanceado, pensaría que este país necesita una amnistía, necesita autoridad", explicó el jefe natural del Centro Democrático.
Y es que Uribe aprovechó el encuentro para criticar que producto del Acuerdo de Paz los antiguos comandantes de la desmovilizada guerrilla de las FARC permanezcan libres, con derechos políticos que les permiten ejercer como congresistas, mientras que otras personas como militares estén condenados a largas penas de prisión.
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Una eventual ley de amnistía extinguiría las acciones penales y las sanciones impuestas, por ejemplo a exmilitares, respecto a los delitos que comprenda, dejando subsistente la responsabilidad civil y a salvo los derechos de quienes puedan exigirla.
Por otra parte, es clave señalar que Uribe es el cuarto expresidente colombiano que habla con la Comisión de la Verdad, cuyo mandato termina en noviembre de este año. Ernesto Samper y Juan Manuel Santos testificaron públicamente, mientras que César Gaviria lo hizo en privado.
La Comisión de la Verdad dijo que con base en su misión de esclarecimiento, escuchó los aportes de Uribe Vélez y los someterá a a análisis y contraste como ha hecho con los aportes de los demás exmandatarios y personas que han entregado su verdad a la institución.