En el discurso de entrega del cargo de presidente del Senado, el congresista Lidio García abrió el debate en Colombia de convertir al país en un estado federal, propuesta que realizó al Congreso y que cambiaría la organización del país.
“Los nuevos días demandan, honorables congresistas, que pongamos otra vez sobre el tapete de la discusión necesaria, la conversión de Colombia en un Estado Federal, con la plena e indiscutible autonomía de sus regiones”, aseguró García.
Es tal la antigüedad del debate que esta propuesta dividió en su momento a Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander, pero en qué consiste un Estado Federado y qué podría generar de instaurarse en Colombia.
Mauricio Jaramillo, profesor de la Facultad de Estudios Internacionales, Políticos y Urbanos de la Universidad del Rosario explicó a KienyKe.com en qué consiste este sistema de organización política.
“La diferencia respecto de un estado central unitario a uno federal consiste en el grado de autonomía que se le da a los gobiernos subnacionales o intermedios. En teoría en un Estado Federal el nivel de autonomía de departamentos, estados, provincias es mucho mayor”, explicó Jaramillo.
Uno de los ejemplos de este tipo de organización es Estados Unidos, “donde algunos estados tienen pena capital, otros no; en algunos hay legalización de drogas blandas, en otros no; y la legislación del aborto también varía”, agregó Jaramillo.
A pesar de que todos los estados estarían regidos por una constitución general, cada estado tiene, en una organización teórica, la autonomía de decidir algunas normas al interior de sus territorios.
Respecto a la pertinencia del sistema, el profesor Jaramillo señaló: “Todos los sistemas son inexpertos, su éxito depende del funcionamiento, desde que sean democráticos son ideales. Las ventajas que podría traer es un mayor grado de autonomía, que se fortalezca la democracia local, por ejemplo”.
“Colombia tiene una tradición histórica de mucho centralismo, el centro ha visto con desprecio, poco interés e ignorancia territorios que consideran periféricos y lejanos, de difícil colonización y control. Entonces uno podría pensar que haya una transferencia de recursos más efectivos, que haya más autogobierno, que los gobiernos alejados de Bogotá tengan la posibilidad de manejar sus recursos”, afirmó el profesor de la Universidad del Rosario.
Establecer este tipo de organización política en Colombia podría traer efectos positivios, como los señalados, pero también algunos negativos por el conflicto armado interno y la poca presencia de institucionalidad en territorios alejados del centro del país.
“El estado federal podría tener efectos sobre la unidad colombiana muy grandes. Colombia ha tenido problemas de control del Estado en varios territorios, en las regiones donde el Estado ha sido débil, es frágil, no hay institucionalidad y hay violencia histórica, esto podría llegar a ser dramático. Si el Estado pierde control y autoridad o presencia en esos territorios, a través de la sesión de un poder a un gobierno subnacional, el descontrol puede ser aún mayor”, señaló Jaramillo.
En su concepto no es necesario pasar a un estado federal para otorgarle mayor autonomía a los gobiernos departamentales, esto podría realizarse a través de otro tipo de reformas y no un cambio sustancial de la organización política nacional.
“Habría que redactar una nueva Constitución porque desde el preámbulo lo define en un Estado unitario y todo el desarrollo normativo está basado en esa idea. Hay que recetar el sistema político como se recetió en el 91 que saltamos a un Estado social de derecho, con autonomía y plurinacionalidad. Eso implicaría no una reforma típica, sino constitucional porque es cambiar la forma de Estado que tenemos”, explicó el profesor.
También, la creación de un estado federal podría generar la profundización de los problemas que tiene el país actualmente, tales como la corrupción porque significaría la transferencia de recursos a gobierno locales, sin un control político. Así mismo generar mayor debilidad en los lugares donde los grupos armados tienen mayor poder.
La discusión quedó en el discurso del senador Lidio García, pro hasta el momento no se conoce si será parte de la agenda legislativa del senador durante la actual legislatura.