En la noche del martes 23 de abril, el Senado de la República aprobó la reforma pensional en la plenaria. En esta última votación, el gobierno de Gustavo Petro, con una ofensiva dirigida por el ministro del interior, Luis Fernando Velasco, logró 49 votos a favor y cuatro en contra.
Ahora, esta reforma social presentada por el gobierno, deberá pasar a otros dos debates en la Cámara de Representantes para que pueda, finalmente, ser convertida en ley de la República de Colombia.
Cabe resaltar que, aunque en la última votación esta reforma solo obtuvo cuatro votos a favor, varias figuras políticas no la aprueban, argumentando que esta reforma estaría afectando negativamente a una parte de la población.
Uno de los políticos que tomó vocería fue el ex candidato presidencial y a la Alcaldía de Bogotá, Jorge Enrique Robledo, quien desde un principio se posicionó en contra de la reforma, ya que, aseguró, iría “contra los Jóvenes y la clase media”.
“Lo cierto es que la reforma pensional aprobada ayer en el senado les hace un fuerte recorte a los derechos pensionales de los jóvenes, menores de 40 y hasta 45 años de edad. Y reduce los derechos de quienes ganen más de 2,3 salarios mínimos -unos 3 millones de pesos” aseguró Robledo en sus redes sociales tras la aprobación.
Los puntos claves de la reforma pensional
Una de las características esenciales de esta reforma es que, a comparación del sistema actual, se estaría proponiendo que todos los colombianos que aporten a pensión, lo hagan desde Colpensiones de manera obligatoria.
Esto quiere decir que, si se desea cotizar para obtener pensión en Colombia, se deberá aportar un máximo de 2,3 salarios mínimos directamente a Colpensiones, esto para asegurar que todos los colombianos tengas acceso a una pensión mínima.
Si una persona desea aportar un dinero extra para garantizar su pensión, esta actividad deberá realizarse directamente desde un fondo de pensiones privado en modo de ahorro, no necesariamente como aporte pensional.
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Este proyecto presentado por Gustavo Petro está compuesto por cuatro pilares fundamentales: solidario, semicontributivo, contributivo y ahorro voluntario; los cuales, según el texto presentado, trabajarían de la mano para apoyarse.
Bajo este modelo, se pretende brindar una renta básica a las personas que lo necesiten. Desde el gobierno se propone un valor mensual de 223 mil pesos. Además, se asegurará una renta vitalicia a las personas que no alcancen a cotizar todas las semanas.
El este sistema, también existe la posibilidad de hacer aportes voluntarios con el motivo de aumentar la pensión que, en un futuro, recibirá la persona y, además, este documento está construido con un enfoque de género; esto quiere decir que las mujeres tendrán una edad menor de pensión que las de los hombres.
Por último, para conseguir el último voto necesario para que se aprobara la reforma, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, añadió un artículo en el que las personas pertenecientes a las comunidades Afro e Indígena se pensionarían con menos semanas acomuladas y menor edad.
