Katherine Miranda es representante a la Cámara de la Alianza Verde y este 13 de marzo espera ser reelegida para esta corporación con el número 101 de dicha colectividad política. En esta ocasión, espera seguir haciendo un buen trabajo por Bogotá, pues considera que “muchas personas se hacen elegir por nuestra ciudad, pero pocos son las que realmente trabajan”.
En entrevista con Kienyke.com, la ahora candidata habló sobre sus propuestas, logros y proyecciones de cara a este próximo periodo legislativo (2022-2026). “Tenemos varios proyectos de ley en el tintero que de verdad necesitamos realizar y el control político. Independientemente de quién sea el próximo presidente, es necesaria una voz crítica y una lupa enorme que señale los grandes problemas del país para poder solucionarlos”, manifestó la funcionaria pública.
Lo cierto es que en materia de control político, Miranda destacó con su bancada, al lado de otros representantes como Inti Asprilla o Mauricio Toro, con debates de moción de censura a la exministra TIC Karen Abudinen por los 70 mil millones perdidos de Centros Poblados o contra el actual ministro de Defensa, Diego Molano.
De hecho, el más reciente de esos casos, el de Abudinen, derivó en todo un pleito jurídico luego de que públicamente y en diferentes instancias la representante relacionara el apellido de la exfuncionaria con el verbo “robar”. Algo que al día de hoy la tiene cohibida de poder referirse públicamente a dicho término y que incluso derivó en la caída de sus vallas de publicidad política (que luego volvió a poner con un pequeño cambio).
Vea la entrevista completa con Katherine Miranda:
“Recibí una denuncia por parte de la exministra ante la Corte Suprema de Justicia. Además, tenía mucha presión por parte de la señora, siempre me atacaba…Estoy haciendo mi deber constitucional que es el control político, nosotros tenemos dos funciones: hacer leyes y control político y este para mi este ha sido súper importante”, aseveró Miranda en referencia a lo que para ella son las responsabilidades del Congreso.
Ya en en el plano de sus propuestas, como espera ser reelegida, le parece importante primero hablar de los resultados obtenidos en la legislatura pasada: “Hemos presentado 120 iniciativas legislativas en lo largo de estos cuatro años y hemos hecho tres mociones de censura donde hemos logrado sacar a la exministra Karen Abudinen”. También destaca su autoría de la ley de imprescriptibilidad de los derechos sexuales cometidos contra niños, que hoy no permite que se venzan este tipo de crímenes y que las víctimas puedan “acceder a la justicia en cualquier momento de su vida”.
De igual manera, nombra algunos proyectos que están a punto de completarse y en los cuales tiene participación: la eliminación del 4x1000, que va en segundo debate; tipificación del acoso sexual callejero, igualando su connotación con el acoso sexual en el ámbito privado; un proyecto que adelanta junto a Johana Bahamón, que solo le falta un debate, para garantizar segundas oportunidades a la población pospenada; una reforma estructural a la Policía Nacional, entre otras iniciativas.
En materia económica, al igual que la mayoría de aspirantes al Congreso, apoya una reforma tributaria pero bajo unos parámetros muy específicos: “Partir de una revisión de las exenciones tributarias que hoy existen a las grandes empresas, que se han dado por lo menos en las últimas 10 reformas tributarias que hemos tenido, y mirar quién realmente puede y debe tributar”.
“La última reforma tributaria fue un pañito de agua tibia que realmente no generaba ningún impacto, simplemente quería mostrarle a la comunidad internacional que se podría tener una solvencia económica, pero no estaba haciendo una reforma estructural para evaluar los problemas que tenía el país”, opinó la candidata.
En relación con su trabajo por Bogotá, circunscripción para la que aspira ser reelegida, resalta haber logrado “recursos por más de 100 mil millones de pesos para la recuperación del Río Bogotá” y la modificación de la estampilla del adulto mayor, que permitió aumentar la construcción de centros noche para que la población de habitantes de calle pueda tener una mayor posibilidad de dormir bajo un techo en las noches.
Finalmente, Katherine Miranda es enfática en asegurar que para que todo cambie tiene que haber un cambio en el sistema electoral y la forma en la que los colombianos eligen a sus representantes y senadores. “Es importante votar bien, ponerle cara al voto y jalarle las orejas al congresista”, manifestó, añadiendo que así y solo así los parlamentarios recordarán que el pueblo y sus necesidades son sus verdaderas prioridades.