El exministro recalcó que los colombianos no están frente a una paz de solo fusiles, que lo que se espera es una paz grande, una paz de inclusión.
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Sergio Jaramillo por su parte indicó que en este momento el proceso está en una etapa en la que se negocia que las FARC dejen las armas y el gobierno les garantice seguridad, facilidad para entrar a la vida política y la reintegración a la vida civil.
Aunque algunas voces, entre ellas las de las FARC, dicen que la fecha de la firma de la paz para el próximo 23 de marzo no se logrará, De la Calle dijo que se está trabajando muy duro para lograr ajustarse a ese plazo.
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El ex vicepresidente volvió a defender el plebiscito como ruta para refrendar los acuerdos que se logren en La Habana tras la firma de la paz. Aunque las FARC han dicho que no están de acuerdo con esta vía, e impulsan una constituyente para la refrendación.
De la Calle insistió en que una constituyente es un camino muy demorado y sin sentido, ya que este necesitaría una ley, dos votaciones y un umbral de votos más alto, entre otras circunstancias. David Bojanini, presidente del grupo Sura y representante de un sector de empresarios colombianos en la mesa, indicó que cuando él y otro grupo de empresarios hablaron con el secretariado de las FARC en Cuba vieron un claro y evidente compromiso con la paz.Bojanini indicó que las FARC hablaron de posibles proyectos productivos e incluyentes para que las personas desmovilizadas puedan ingresar a la vida civil.
También dijo el empresario que las FARC les plantearon un temor generalizado y es que a ellos les pase lo mismo que le ocurrió a la UP cuando intentaron aspirar a cargos de poder político. Y contó también que cuando ellos hablaron de la importancia de no cambiar el modelo económico del país, el secretariado les aseguró que ellos no están a favor del modelo ‘castrochavista’. Cuando De la Calle habló del escepticismo de un sector hacia el proceso, dijo que aunque este es natural, se ha incrementado debido a la “habladera de las FARC”, que muchas veces ha contenido propuestas y declaraciones agresivas, tanto que en medio de las conversaciones les han criticado sus declaraciones y les han hecho saber que pareciera “que estuvieran trabajando con la oposición”.Los panelistas cerraron sus intervenciones con una invitación a combatir la corrupción, que de continuar, así se firme el acuerdo en La Habana, la paz no sería un realidad.
Bojanini dio claras muestras de que la empresa privada, al menos el sector que él representa, está interesada en apoyar el fin del conflicto a través de alianzas público-privadas que generen primero que todo una recuperación del campo.De la Calle cerró la charla diciendo que las críticas que le hacen al proceso son bien recibidas, ya que sobre el disenso es que se tiene que construir la paz, así mismo le hizo un llamado al ELN a unirse al camino de la paz y aseguró que los colombianos tienen que prepararse para la paz.