El expresidente colombiano Iván Duque, en una reciente entrevista, ofreció una reflexión profunda sobre los desafíos diplomáticos y de seguridad que enfrenta Colombia, destacando dos temas cruciales: la relación con Estados Unidos y la creciente amenaza del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el Catatumbo.
En sus declaraciones, Duque mostró su preocupación por la gestión actual del gobierno colombiano en estos aspectos, advirtiendo sobre las consecuencias de una diplomacia poco rigurosa y una estrategia de seguridad debilitada frente a los grupos armados ilegales.
La crisis diplomática con Estados Unidos
Una de las cuestiones que más preocupa a Duque es la reciente crisis diplomática con Estados Unidos, particularmente por los comentarios y medidas impulsadas por el presidente Gustavo Petro.
Según Duque, el manejo de las relaciones internacionales por parte del actual gobierno ha sido “irresponsable” y “peligroso”, llevando a Colombia al borde de una ruptura con su principal aliado internacional. En su entrevista, el expresidente enfatizó que el país estuvo cerca de vivir “el peor momento de las relaciones bilaterales con Estados Unidos en 200 años”.
Duque explicó que Colombia ha sido históricamente un aliado clave de Estados Unidos, especialmente en temas como la lucha contra el narcotráfico, la migración y la inversión.
Recordó cómo durante la administración de Donald Trump, la relación entre ambos países fue sólida, con Colombia recibiendo apoyo en diversos frentes. Sin embargo, la situación actual parece haber cambiado radicalmente tras las acciones y mensajes del presidente Petro, que Duque calificó como una "bravuconada populista" que buscaba ganar protagonismo político.
Iván Duque también destacó que las políticas migratorias de Estados Unidos, especialmente las deportaciones masivas, no son algo nuevo. Sin embargo, la actitud beligerante y mal manejada por el gobierno de Petro ha puesto en riesgo la estabilidad económica y social de Colombia.
En particular, mencionó las deportaciones de colombianos desde Estados Unidos, las cuales se incrementaron durante los últimos años, y cómo Petro no ha mostrado la misma indignación por la dignidad de los deportados. Duque subrayó que este tipo de medidas en contra de la inmigración no son un fenómeno reciente y que la diplomacia colombiana debe enfocarse en manejar las relaciones con los Estados Unidos a través de los canales adecuados, sin recurrir a mensajes impulsivos.