Cuando se dice que en la lista de aspirantes al Congreso de la República hay de todo es porque en realidad es así. Desde políticos tradicionales hasta los que juran ser independientes, como también reconocidos mentalistas y hasta un líder antivacunas, que avalado por el Partido Conservador pretende defender los intereses de quienes no creen en la pandemia del covid-19 desde el legislativo.
Su nombre es Esteban Ramírez, es líder del movimiento cristiano Familia por la Verdad que está en contra del aborto y del Plan Mundial de Vacunación. Además, es hijo del exconcejal de Bogotá, Marco Fidel Ramírez, activista provida y conocido como el 'concejal de la familia'. Desde finales del año pasado recibió el visto bueno de los conservadores para que vaya al Senado a legislar en contra de la vacunación.
A lo largo de los últimos años Ramírez ha convocado marchas, plantones y todo tipo de manifestaciones para convencer a uno que otro incauto de que el covid-19 no existe, sino que se trata de una conspiración de millonarios como George Soros y Bill Gates para controlar a la población y establecer el nuevo orden mundial.
Según este candidato, las vacunas contra el coronavirus no son más que sustancias experimentales y que además contienen los ingredientes suficientes para envenenar a quienes se las apliquen. "Han llegado tan lejos por su obsesión de vender sus sustancias experimentales y envenenar con ellas a la población, que hoy están afectando a nuestros niños", aseguró en uno de los plantones.
El origen de sus planteamientos puede estar relacionado con las ideas de su papá, quien también es un confeso antivacunas que ha difundido la idea de que estas sustancias que han salvado la vida de millones de personas en el mundo son en realidad un problema, un arma que los "poderosos" usan contra las personas.
"Farmacéuticas criminales, gobiernos mentirosos, presidentes arrodillados, medios vendidos y millones de seres humanos engañados inoculados y envenenados, condenados a número infinito de dosis y refuerzos “necesarios”. ¡Nos están matando! Y nos estamos dejando", señaló hace poco en su cuenta de Twitter.
En este punto es fundamental señalar que, pese a que Ramírez tiene derecho a creer en lo que le plazca, según el Ministerio de Salud y Protección Social y con datos derivados de la Cohorte Esperanza, se ha observado un mayor riesgo de enfermar gravemente y de morir por covid-19 entre las personas no vacunadas en comparación con quienes tienen esquema completo de vacunación.
Julián Fernández Niño, director de Epidemiología y Demografía, explicó que basándose en el comportamiento del grupo de 50 a 59 años, "vemos para el caso de hospitalización un riesgo de 72,3 entre febrero y diciembre de 2021, esto quiere decir que existe un riesgo 72,3 veces más alto de hospitalización por covid-19 entre los no vacunados en comparación con los totalmente vacunados".
Ahora, en ese mismo grupo de edad, el riesgo de morir por covid-19 es 132,8 veces más alto entre los no vacunados en comparación con los vacunados completamente. "Por eso la importancia de la vacunación contra el covid-19, especialmente en los grupos de mayor riesgo. Estos resultados nos permiten evidenciar la importancia de la vacunación en nuestro país y es, también, una invitación para que quienes no lo han hecho se acerquen a un punto de vacunación lo antes posible", dijo el director.
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La más reciente protesta liderada por el candidato avalado por los conservadores fue convocada luego que en Colombia se abriera el debate por la exigencia de la vacuna contra el covid-19 para asistir al trabajo, el cual gira en torno a si ello representa o no una afectación a los derechos laborales de las personas.
La decisión fue dada a conocer a través de la circular 003 del 12 de enero del 2022 del Ministerio de Trabajo, por medio de la cual se dictó la “exigencia de esquema de vacunación covid-19 a trabajadores de los sectores productivos abiertos al público”, en aras de igualar las exigencias sanitarias en estos espacios y velar por la salud de todos los involucrados en este importante sector de la economía.
Detrás de todo ello, se le dio la bienvenida a Colombia a un debate de grandes tallas y cientos de aristas: ¿La exigencia del carné de vacunación en el plano laboral afecta el derecho al trabajo de los ciudadanos? Esta conversación ha tenido focos importantes en Estados Unidos y Europa, donde de un tiempo para acá se viene exigiendo este documento para poder ocupar distintos puestos de trabajo.
En Colombia, este debate también está presente y en parte está liderado por grupos antivacunas o religiosos. Precisamente, el exconcejal de Bogotá y su hijo lideraron una marcha para el pasado 21 de enero frente a las instalaciones del Ministerio para exigir que se eche abajo la exigencia del carné sanitario en el plano laboral. Según el candidato al Senado por el partido Conservador, esto representa para la sociedad colombiana una “extorsión laboral”.
Aunque sus argumentos tienen poco fundamento, el Partido Conservador le entregó el aval y con ello más herramientas para pararse en una tarima y seguir haciendo eco de sus posturas. Y que precisamente haya sido ese partido el que avaló a Ramírez resulta inquietante, puesto que es la colectividad de; por ejemplo, la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, quien desde el ejecutivo ha promovido la vacunación para evitar la muerte de millones de colombianos.
