Sergio Andrés Martínez es el hermano del menor de edad que falleció tras recibir un impacto de bala por parte de un soldado de batallón, el pasado sábado 27 de julio. El hecho ocurrió cuando el joven ingresó a la base militar de La Lizama, en Barrancabermeja.
Martínez dijo que cada vez que los militares se encontraban con su hermano y sus amigos, le pedían estupefacientes. "Hay un audio también donde el mismo militar dice 'yo meto eso, yo meto eso'".
La situación, reitera, llevaba meses, "porque no les conseguían el vicio, o se los daban; entonces los amenazaban". Denunció que la actuación irregular es reiterada con la comunidad en general.
la Justicia Penal Militar y la Fiscalía General de la Nación abrieron una investigación, penal y disciplinaria, para esclarecer cómo fue la muerte del joven y determinar qué pasará con el uniformado que accionó el arma.
El Fiscal encargado Fabio Espitia adelantó que lo sucedido en La Lizama podría ser un homicidio culposo y no un homicidio doloso.
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[single-related post_id="1151007"] En entrevista a la emisora W Radio, Martínez dijo que el problema con los soldados se venía presentando desde hace meses y que antes de recibir el impacto fulminante, a su hermano Rafael Antonio Caro Álvarez le propinaron una golpiza. El familiar dijo que tenía previsto denunciar, pero que la muerte del joven llegó primero. Según Martínez, el joven que cayó en La Lizama había recibido amenazas a través de las redes sociales y cuando lo veían en la calle "porque el diario pasaba por la base". El hermano de la víctima aclaró que los dos videos que circulan por las redes sociales no son de la misma fecha. Uno de ellos, el del enfrentamiento, es del día viernes. El audiovisual donde el menor recibe el disparo, es del día sábado. [single-related post_id="1149972"] También denunció que el sábado 27 de julio a Rafael Antonio le propinaron, más temprano, una golpiza. Dijo que luego regreso al lugar donde se encontraban los uniformados y estos lo retaron a entrar a la base. "Él ni corto, ni perezoso, en medio de su locura, de su angustia, se metió y ahí en el video que muestra que le hicieron muchos tiros, muchos tiros, ráfagas", declaró el familiar.
Martínez dijo que cada vez que los militares se encontraban con su hermano y sus amigos, le pedían estupefacientes. "Hay un audio también donde el mismo militar dice 'yo meto eso, yo meto eso'".
La situación, reitera, llevaba meses, "porque no les conseguían el vicio, o se los daban; entonces los amenazaban". Denunció que la actuación irregular es reiterada con la comunidad en general.
la Justicia Penal Militar y la Fiscalía General de la Nación abrieron una investigación, penal y disciplinaria, para esclarecer cómo fue la muerte del joven y determinar qué pasará con el uniformado que accionó el arma.
El Fiscal encargado Fabio Espitia adelantó que lo sucedido en La Lizama podría ser un homicidio culposo y no un homicidio doloso.
