La guerra en Ucrania desatada el pasado jueves 24 de febrero luego de que el presidente Vladímir Putin anunciara una ‘operación militar’ que decantó en varios ataques de tropas rusas en territorio ucraniao ha generado varias consecuencias y sanciones a nivel global.
Uno de los actores en responder a lo que sucede en este país de Europa oriental es la Unión Europea que recientemente comunicó al mundo que cerraría el espacio aéreo a aerolíneas rusas en 27 países que hacen parte de este grupo como parte de las sanciones a Rusia por sus acciones al pueblo ucraniano.
Este anuncio fue hecho por la presidenta de la Unión Europea, Ursula Von der Leyen y el alto representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell quienes resaltaron que hace parte de las sanciones que se suman a otras decisiones que han venido tomando en los últimos días desde que el conflicto arrancó.
Algunos de los países que cerraron sus cielos son Alemania, Polonia, Bulgaria, Rumanía y las tres repúblicas bálticas: Letonia, Lituania y Estonia. También se han sumado España, Francia, Italia, Bélgica, Dinamarca, entre otros:
“Nuestro espacio aéreo se cerrará a cualquier avión ruso, y esto incluye los jets privados de los oligarcas”, ha comentado Von der Leyen, haciendo énfasis en la unidad entre naciones y su rechazo a las decisiones de Putin.
Esta medida busca sentar un precedente a lo sucedido en los últimos días y mostrar apoyo al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Además de esta acción hay muchas más como la prohibición de las principales cadenas de televisión internacional de Rusia financiada por fondos del estado como la RT o Sputnik TV, así como sus filiales.
Por otra parte, la Unión Europea sigue estudiando nuevas sanciones y también revisando los planes de contingencia por estas medidas, pues muchas de las decisiones que han tomado son de doble filo y también impactan la economía de las naciones que hacen parte de esta organización.