Se habla de proteger al país del “enemigo invisible” bloqueando temporalmente la entrega de green cards. Desde un sitio web gubernamental se pueden ver nuevas imágenes de la construcción del muro de la frontera sur en una transmisión en línea.
Si quedaba alguna duda, se disipó esta semana: el presidente Donald Trump está haciendo de su mensaje antimigratorio la piedra angular de su campaña de reelección.
A pesar de ello, hasta este momento los electores latinos no están diciendo que saldrán multitudinariamente a votar por el exvicepresidente Joe Biden, quien cuenta con su apoyo para ganar en estados clave como Arizona, Florida y Pensilvania. Las nuevas encuestas indican que el 45 por ciento de los latinos aprueba la manera en la que el presidente ha manejado el coronavirus.
Mientras que Biden sigue siendo el candidato de la mayoría de los votantes hispanos registrados, con un 59 por ciento, Trump es la elección de un 22 por ciento, según una encuesta publicada el viernes por Latino Decisions, una empresa de encuestas demócrata con sede en Los Ángeles.
Aunque la encuesta se llevó a cabo antes de sus más recientes declaraciones y acciones sobre la inmigración y el coronavirus, es la evidencia más reciente de que Trump mantiene un apoyo constante de una parte significativa del electorado latino. Varias encuestas entre latinos en los estados de batalla han mostrado consistentemente que Trump recibe un poco más del 20 por ciento de los votos.
La encuesta también muestra que el entusiasmo por Biden parece estar decayendo, solo fue aceptado por el 67 por ciento de los votantes latinos registrados en febrero.
“Incluso mientras Trump continúa con esta paliza a los inmigrantes, estos votantes no lo culpan por lo que está sucediendo en el país en este momento, le dan el beneficio de la duda”, explicó Matt Barreto, quien dirige la empresa de encuestas. “Hay un déficit de entusiasmo; la gente está perdiendo sus trabajos, quedándose sin seguro médico, sin casa y no escuchan cómo el Partido Demócrata está tratando de resolver eso”, agregó.
Se espera que los latinos sean el bloque de electores étnicos no blancos más grande este otoño y los demócratas han dejado claro que creen que la participación histórica del grupo llevará a victorias significativas en los estados que son cruciales para recuperar la Casa Blanca.
Antes de la pandemia, muchos operadores políticos dijeron que estaban viendo niveles sin precedentes de compromiso y entusiasmo entre los latinos, en parte impulsados por la ira sobre lo que consideran los mensajes nocivos del gobierno de Trump y su política migratoria.
Sin embargo, muchos operadores latinos han advertido a los demócratas en repetidas ocasiones que no den por hecho que cuentan con el voto de este grupo. Suponer que el enojo hacia el gobierno de Trump se traducirá fácilmente en una victoria para Biden es un error, dicen.
Argumentan que la preocupación es una brecha de entusiasmo: no se trata de que menos latinos vayan a votar por Trump, sino de que ni siquiera van a votar. En una encuesta realizada a finales de febrero, el 73 por ciento de los electores latinos dijeron que estaban “casi seguros” de votar en noviembre. Dos meses después, ese número disminuyó a un 60 por ciento.
“No quiero que se subestime a la comunidad latina de este país y tendemos a hacerlo”, afirmó Henry Muñoz, exfuncionario del Partido Demócrata que ayudó a iniciar Somos, una red de profesionales de la salud en la ciudad de Nueva York, y quien pagó por la encuesta.
“Los latinos no votan porque no creen que nadie que ocupe la presidencia los tome en cuenta. No creen que, si votan o se organizan, lo que pase afectará a su familia”, agregó el exfuncionario.
A pesar de la implacable atención de Trump a la inmigración, el tema nunca fue visto como una prioridad para los demócratas durante las primarias. Aunque los candidatos criticaron rotundamente las políticas del gobierno actual sobre las separaciones familiares, pocos articularon claramente cómo manejarían las cuestiones de política migratoria de estar en la Casa Blanca.
Los activistas migratorios se quejaron e interrumpieron varios debates para llamar más la atención sobre el tema, además de criticar a Biden por su participación en el gobierno de Obama, durante el cual se deportó a más de 2,5 millones de inmigrantes.
Durante mucho tiempo, los líderes políticos latinos han exhortado a los candidatos a pensar más allá de la inmigración para tratar de atraer a los votantes latinos. Y la pandemia ha puesto en primer plano muchos temas que por mucho tiempo han sido el centro de atención de los latinos: la desigualdad, el acceso a la atención médica, los empleos y la educación.
Marisa Franco, directora ejecutiva de Mijente, un grupo de activistas latinos que apoyó a Sanders en las primarias y que aún no ha respaldado oficialmente a Biden, dijo que quería ver que la campaña hiciera más para atraer el apoyo de las bases.
“La campaña de Sanders realmente logró atraer a las personas, que luego regresaron a sus barrios de origen, donde sus vecinos confían en ellos y hablaron del candidato de una manera mucho más convincente”, manifestó Franco. “Creo que eso es lo que la campaña de Biden no ha hecho y es algo que deberían hacer”, añadió.
Por: Jennifer Medina