La situación política en Perú vuelve a dejar al ejecutivo expuesto a una nueva crisis de gobernabilidad. Para evitar el levantamiento popular, el presidente Pedro Castillo decretó un toque de queda en Lima en las primeras horas de este martes 5 de abril.
La decisión, que tomó por sorpresa a los limeños, fue cuestionada por opositores de derecha y de izquierda. Es por eso que ante la presión popular y política, Castillo dio por terminado el estado de emergencia que finalizaba a la noche de este martes.
- Lea también: Rusia acusa a Ucrania de atacar su territorio con bombardeo
- Le puede interesar: Presidente de Turquía: "Conversaciones entre Zelenski y Putin van en dirección favorable"
"A partir del momento vamos a dejar sin efecto esta inamovilidad [toque de queda]. Corresponde llamar a la tranquilidad al pueblo peruano", dijo Pedro Castillo en una alocución junto a María del Carmen Alva, presidenta del Congreso y opositora.
Las protestas del pasado lunes dejaron cuatro personas muertas y decenas de detenidos en Lima y Callao principalmente. El conflicto se generó por el paro de la Unión de Gremios de Transporte Multimodal del Perú como respuesta a la subida de precios del combustible.
Cabe destacar que la crisis del ejecutivo viene desde hace varios días, cuando el Congreso propuso una solicitud de vacancia que finalmente no fue aprobada.
Para calmar los ánimos, Castillo se reunió en las últimas horas con sectores de la oposición y así dar por finalizado el levantamiento popular.