Amirtha Kidambi, reconocida compositora y figura intelectual en el mundo del jazz contemporáneo, llegó a Bogotá para compartir su arte y su visión única este viernes 12 de julio cuando se presentará en el Centro Nacional de las Artes Delia Zapata Olivella con su proyecto Elder Ones.
A través de una trayectoria marcada por la perseverancia y la autoeducación, Kidambi ha desafiado los estigmas de género arraigados en la educación musical occidental.
Originaria de una familia inmigrante proveniente de la India, Amirtha comenzó su formación musical en escuelas públicas de Estados Unidos, donde descubrió su pasión por la música a través del coro y la banda de conciertos.
A pesar de su temprano interés en la composición, las barreras económicas y los estigmas de género la desalentaron inicialmente de seguir ese camino en su juventud.
"Recibí toda mi formación en la escuela pública. Estuve en el coro y toqué en la banda de conciertos en la escuela secundaria, tomé todas las clases de música que había disponibles", mencionó Kidambi en una entrevista en 2019 para el portal Jazz Right Now.
Fue su determinación la llevó a especializarse en interpretación vocal y composición, a pesar de las presiones sutiles que la dirigían hacia roles más tradicionalmente femeninos en la música.
Y es que la historia de Amirtha con la música es un reflejo de lo que deben enfrentar las mujeres en el campo de la composición musical, especialmente en el ámbito del jazz y la música clásica que de hecho resulta muy “occidental”. Ella misma se vio enfrentando estas percepciones mientras luchaba por encontrar su voz en un campo dominado por hombres.
Actualmente, Amirtha Kidambi es conocida por su liderazgo en la banda Elder Ones con el que se presentará en la capital colombiana, destacándose como una compositora innovadora y educadora comprometida. Su carrera ha sido un testimonio de dedicación y un desafío constante a las normas establecidas en la música.
A Kidambi le interesa la intensidad y lo extremo, la individualidad y la expresión, la subversión, la música y los sonidos que van en contra de algún tipo de sistema establecido. En su propuesta se mezclan herencias y exploraciones que responden a su curiosidad y a sus visiones políticas. Esto se traduce en un sonido desafiante, nutrido de la improvisación y en el que confluyen la música experimental, el jazz y la música tradicional del sur de Asia.
La artista ha usado la composición y el trabajo con el sonido en un acto de protesta, disruptivo, que se refleja en su compromiso por confrontar las narrativas dominantes, que trasciende a su papel como activista de causas que cuestionan los sistemas de la supremacía blanca, el colonialismo, el capitalismo y el patriarcado.
“Como artista, siempre estoy pensando en formas de usar mi voz en el escenario y en la esfera cultural para inyectar energía en estos momentos revolucionarios y apoyar a aquellos que han estado trabajando incansablemente sobre el terreno. Puede parecer desesperanzador, pero estar en la carretera durante el último mes me recordó el poder de la música en tiempos cruciales de transformación social”, dice la artista.
Amirtha Kidambi no solo desafía el statu quo con su música, sino que también aboga por un cambio profundo en la percepción y la práctica musical.
En su visita a Bogotá, Amirtha Kidambi no solo ofrecerá un concierto memorable, sino que también compartirá su historia de resistencia y resiliencia, inspirando a una nueva generación de músicos y compositores a seguir sus pasos y desafiar los límites establecidos en el arte y la educación musical.