La poesía terapéutica es una herramienta maravillosa, la cual nos permite expresar muchos de los secretos y emociones que habitan en las profundidades del inconsciente y las dimensiones del alma.
El poder de la palabra escrita es transformativo, pues hace materializar los pensamientos. Además, nos libera y sana al permitir conocernos a nosotros mismos, dándonos el valor de explorar y experimentar temas esenciales de la vida tales como: la muerte, el dolor, la incertidumbre, la belleza y la pasión contenidas en el amor.
El amor es un misterio, que, al fusionarse con nuestras emociones reflejan lo mejor de cada uno en virtudes como la compasión, la resiliencia, la solidaridad, el perdón y el deseo de bienestar para el ser amado.
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En otros casos, no tan afortunados, al exagerar este sentimiento y convertirlo desde nuestro ego en posesión y control, puede hacer emerger lo más negativo de las personas, especialmente, la obsesión, los celos y la codependencia.
De igual manera, es una expresión natural del deseo sexual, el erotismo y la intimidad que pueden escalar y evolucionar hacia el amor romántico, familiar, fraternal y espiritual, en donde su fuerza se manifiesta en la trascendencia del espíritu para conectarse con la energía creadora que mantiene unida a todas las cosas y al universo mismo.
El amor es algo que sucede. Por lo tanto, es preferible no analizarlo, simplemente aceptarlo. De modo que cuando te amas sanamente a ti mismo, el amor fluye y florece de manera auténtica sin tanto esfuerzo ni lucha.
Como homenaje a los múltiples caminos del amor, he querido compartir con ustedes algunas sencillas poesías, versos libres y textos de mi autoría, los cuales tuve la oportunidad de leer en compañía de mi gran amigo y hermano del corazón, el Maestro y pintor italiano, German Tessarolo.
En medio de una de nuestras conversaciones virtuales, con el propósito de aminorar los efectos negativos de la pandemia en nuestro ánimo, fui gratamente sorprendido por su ofrecimiento de darle vida a estas sencillas inspiraciones, a través de algunas de sus hermosas e inéditas ilustraciones que hoy acompañan este artículo.
Mi deseo es compartir esta experiencia de poesía terapéutica con ustedes, para que también encuentren su propio camino hacia el autodescubrimiento.
La primavera
1. Simplicidad:
El amor en esencia es simple
es sano y liberador.
Quien ama
no envejece, no duda.
Goza de este regalo
del cielo,
que le devuelve la paz.
El miedo es lo contrario al amor
apaga el alma,
confunde la mente,
convoca al dolor y la ira.
Todo lo aniquila.
2. Independencia:
El amor libera.
No invita a la tristeza,
ni te hiere
con el miedo y la duda.
El amor te nutre y fortalece
no te hace ver disminuido
o suplicante,
ni sentirte adolorido,
colérico y confuso.
El amor te independiza
de la mentira, la perfección …
y de cualquier esclavitud.
3. Sigues aquí:
Con tu sonrisa amplia,
natural y perfecta.
Tus ojos grandes
y rasgados.
Sigues aquí.
Después de muchos años
abriéndome tu cuerpo,
los sueños y el alma.
Sigues aquí,
para enseñarme
a descubrir,
que cada fracaso,
vacilación y duda
contigo se superan.
4. Contigo:
Entendí a tu lado
que se puede vivir
con el alma descubierta
sin miedo a que te juzguen
por ser tan humano.
Que nadie obliga al amor.
El amor llega y el amor se va.
Pues, además de amantes,
somos buenos amigos y leales compañeros,
con el único fin
de entregarnos desde la libertad y ser felices.
El verano
1. Hacer el amor:
Nos ilumina,
nos sana y nos redime.
Cualquier error o acusación
pasan a un segundo plano.
Abrazados y desnudos,
lejos del miedo comprendemos
lo que somos
y lo que seremos.
Y sin mentiras
todos los misterios
de nuestro mundo
se revelan.
¡Qué bellos somos
cuando hacemos el amor!
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2. Más allá:
De tu piel y de tus besos,
de tu cuerpo
bañado en sudor,
de tus abrazos cálidos.
Del fuego y el agua
de tus gemidos nuevos
y los mil aromas inéditos
que me ofreces
Y de tus felices lágrimas
por cada sentimiento
que hoy descubres.
¿Qué otro mundo existe, amada mía?
3. Fuego:
Se me quema la piel
cuando estallas
y te desplomas
desnuda
sobre mi pecho.
Transparente como el agua
que me ofreces.
El amor te delata
cuando puedes volar
por encima de tu dolor
y gritar: ¡Te amo!
Hoy avivaste
tu fuego sagrado
para curar mis heridas.
4. Defectos:
Amándonos sin prisa
ni disfraces,
dejándote ir
a donde quieras.
Contemplando,
cómo se mueren nuestros egos,
y se unen por instantes
nuestras almas.
En cada beso,
en cada abrazo y en cada entrega
febril y apasionada,
Nuestros defectos
no parecen
ser tan graves.
5. Amantes:
El auténtico amante no obliga,
controla o manipula.
Quien hace esto no ama.
Sólo tiene miedo a ser abandonado
El amor es algo que ocurre
y nace de forma natural.
Los verdaderos amantes,
no temen entregarse a su pasión,
ni tampoco necesitan luchar
ni obligarse a ser dichosos.
El otoño
1. Me merezco tus mentiras:
Cuando intentas
mostrarte tal y como eres,
pero mi miedo
prefiere disfrazarte.
Me merezco tus mentiras…
Cuando imagino
demonios
en lugar de
unicornios.
Y te juzgo y exagero tus defectos,
para ocultar los míos,
y desde este dolor
que no resuelvo.
Termino ofreciéndote la guerra
en vez de los abrazos
que me pides.
Me merezco tus mentiras…
Por no saber confiar
ni comprenderte,
por asfixiarte con mis celos
y ocultar mi resentimiento
Culpándote por todo
Y por nada…
Por eso y más…
Me merezco tus mentiras.
2. Parejas solas:
Despertar y darte cuenta
que dormiste con ella
y te sientes más solo.
Con las heridas del alma
más abiertas,
por las tristezas de los abrazos
y los besos que hoy se apagan
Confundido e irascible
por decir “Sí”
cuando en realidad querías decir “No”,
sintiendo esta diaria agonía
al comprobar que el “Nosotros”
no existe,
pero el miedo a estar solos
nos convierte en esclavos.
3. Invierno:
La tormenta comienza,
ya no podemos
refugiarnos más.
Algo nos dice
que, con la verdad, o sin ella
el fin está cerca.
Vestidos de viento
nuestros niños interiores
se abandonan de nuevo.
Y ahora caeré,
agotado y sin lágrimas,
y dormiré sobre este nuevo hielo.
Renacimiento
1. Ahora lo comprendo:
Si yo te pido
que cambies tu esencia,
es que en realidad
no he encontrado la mía.
Cuando te escucho decir:
“No sé si me amas”,
entonces eres tú
la que “no sabes que me amas”.
Y si hoy
no estás a mi lado,
es porque ya
no queremos estar juntos.
2. Desapego:
Todo en la vida pasa,
nada es permanente.
Todo cambia…
los pensamientos,
las emociones,
la luz y la oscuridad.
Nuestro cuerpo nos avisa
que está envejeciendo.
Nuestro corazón nos dice
cuando el amor se acaba.
Las creencias y las dudas,
también pasan.
3. Compañera:
Yo vivo por mí,
no para ti …
Me interesa este momento pleno
a tu lado…
jugando, riendo y amando.
Sin miedo y soltando.
Sin competir ni dominarte.
Vivir en paz,
sin exagerar ninguna expectativa.
No sería feliz
si dejo de ser yo
para convertirme en ti.
4. Regresa:
No soy responsable
de tu felicidad
ni tú lo eres de la mía.
Puedes dejarme
y vivir las experiencias
que tu corazón quiera.
Juntos vivimos
todas las pasiones
y todos los dolores
que hoy,
llevamos tatuados
en la piel.
Por eso amor,
¡Regresa cuando quieras!
5. Esencial:
Aparentemente frágil,
pero esencialmente
eterno.
Poderoso en su interior
y conectado
al espíritu de Dios.
Así es la grandeza
del ser humano.