A mediados de 2010, los caballistas y apasionados de la escena equina en Colombia, comenzaron a hablar con “Mercuriogalope”, uno de los veinte mil foristas de la página suscaballos.com. En los criaderos y ferias se referían a sus historias, a su conocimiento en andares y chalanería, de las remembranzas que hacía sobre las mejores bestias de Latinoamérica y de su poder para ofrecer y vender las pajillas del criadero que hoy está a cargo de su hija.
Algunas de esas historias hablan de cómo el narcotraficante Juan Carlos Ramírez Abadía, alias “Chupeta”, le pidió prestado a Destello, un caballo que ya había tenido 2500 hijos y que se le había dado por terminada su reproductividad. Pero “Chupeta”, con artilugios, logró sacarle semen otra vez. “Lo tuvo seis meses, logró sacarle algo de semen y le hizo cinco hijos: tres en la yegua La Carrilera, después me devolvió el caballo con una receptora preñada de Destello por La Carrilera, de ahí nació Resplandor. Tiene uno de los mejores respaldos genéticos que he conocido, no estuve cuando lo domaron, creo que lo dejaron perder buscando hacer un negocio con él. Mi hija no lo vendió y lo conservamos, le creo demasiado a ese caballo”, escribió “Mercuriogalope” en un foro.
Caballo Honor de la Alhambra. Foto Franz.
Un par de meses más tarde, los seguidores de “Mercuriogalope” supieron su verdadero nombre. Todos le preguntaban en el foro por su verdadera identidad, que había titulado Experiencias de un criador… Criadero la Alhambra. Un día, dijo que el nombre del criadero en el título del foro era más que suficiente para que supieran que era Hernando Gómez Bustamante, mejor conocido como “Rasguño”, un hombre que hace seis años era uno de los más buscados del mundo. Por su captura se ofreció una recompensa de cinco millones de dólares. Fue preso y extraditado en julio de 2007, y desde entonces está en la cárcel Treatment Facility, en Washington, desde donde participa en un foro de internet cada semana en temas de ganadería, caballos y le ayuda a vender los ejemplares que le dejó a su hija.
El primer nombre “Mercurio” lo escogió por las siglas que aparecen en la tabla periódica para denominar a ese elemento: Hg. Esas son las iniciales de su nombre, Hernando Gómez.
“El criadero La Alhambra nace en el año 1983 (sic). Empecé el criadero con dos yeguas, la ‘Adelaida’ y ‘la Fanuba’. Me las compró el ‘Mono’ Lopera. Después compré al señor Uriel Ángel, criador de ‘Juguetón’, un potro hermano completo de Juguetón de nombre ‘Bombardío’, lindo ese caballo isabelino, ganó algunos campeonatos, hice algunas crías con él y lo vendí para el criadero la Hondonada. La última vez que lo vi le habían enseñado a tomar cerveza, no supe más de él. Después llegó la ‘Matrona’. Con estos cuatro animales empecé”, escribió “Rasguño” el 2 de octubre de 2010.
Hernando Gómez fue extraditado a Estados Unidos en 2007.
Dos años después de fundar su criadero, en 1985, “Rasguño” contaba con una fuerte red de tráfico de drogas hacia Estados Unidos. Su amistad con el mexicano Amado Carrillo, “El Señor de los Cielos”, le ayudó a amasar una fortuna de más de 300 millones de dólares. De hecho, “Rasguño” confesó en su momento que envió más de 500.000 kilos de cocaína a través de México. Incluso, su récord de envíos fue de diez toneladas de cocaína en una sola noche a Estados Unidos.
Su caballo más adorado siempre fue Destello de Los Naranjos, un caballo que entre otras cosas ha dado al mejor ejemplar en los últimos tiempos de Trocha Pura Colombiana, El Encanto. “Rasguño” cuenta que el caballo tenía un testículo más pequeño que el otro desde que nació, pero eso no le había causado ningún problema para competir, y mucho menos para “servir” a las yeguas. Sin embargo, un par de años más tarde, el caballo perdió el testículo. Entonces ahí vinieron los problemas. El sueño de “Rasguño” era consolidarlo Fuera de Concurso, un caballo campeón de campeones. Pero cuando Destello salía a la prepista, un paso obligado donde se juzgan a los caballos antes de salir a la competencia plena, lo sacaban por no estar en igual de condiciones con sus adversarios. El capo tuvo una idea para pasar ese bache: le mandó a poner una prótesis de silicona a manera de testículo. Así, el caballo logró crear un mecanismo de defensa para que los veterinarios no le tocaran demasiado los testículos, de manera que ha sido el único caballo fuera de concurso, pero con una sola gónada.
Mercuriogalope:
(Agosto 14, 2010, 09:26:11)
“Les cuento algo, al Destello le andamos haciendo un tratamiento, buscando sacarle semen, si se logra, prometo vender el 50% de lo colectado a un buen precio, para que tengan acceso los criaderos y personas que me brindan apoyo en este duro trasegar de mi vida y en ese bello mundo equino, el cual ha sido para mí una forma de vivir y amar”, dijo “Rasguño” el 14 de agosto de 2010 en el foro.
Viviana Gómez, de 29 años, es la hija de “Rasguño” y quien maneja sus caballos. Ella se crió entre Buga y Cartago, en el Valle del Cauca. Viviana, desde temprana edad, mostraba aptitudes para administrar negocios agrícolas, ganaderos e inmobiliarios. Sin embargo, su nombre fue incluido en la lista Clinton en 2002. El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos inscribió tres empresas que estaban a nombre de Viviana Gómez en la lista negra de sociedades colombianas: Agrícola Doima del Norte del Valle LTDA., Inmobiliaria Pasadena LTDA., y Viscaya LTDA. Ver Documento.
Quienes conocen a Viviana, cuentan que se ha levantado de las cenizas, que nunca le ha dado pena que le endilguen que es la hija de un mafioso. Dicen que no es una mujer de fiestas ni de lujos. Cuando vivía en Cartago, sus amigos le insistían que sacará el Ferrari que ocultaba su papá en el barrio El Prado, pero ella siempre se negaba, al decir que eso era de su papá y no de ella. Nunca se subió en ese carro.
Viviana estaba muy joven cuando un caballo llamado El Carmín murió de un fuerte cólico. Ella no paró de llorar durante días, pero no por el millón de dólares que había perdido la familia al no haberlo vendido tres días antes cuando les ofrecieron ese dinero, sino porque su vida ha girado en torno a los caballos.
“Rasguño” vendió el criadero La Alhambra cuando empezó a ser buscado por las autoridades colombianas y estadounidenses. Pero sus mejores bestias fueron trasladadas al departamento de Antioquia, exactamente a Agrícola la Macana, al sur del Valle del Aburrá, a media hora de Medellín. Allá pastan Destello, Honor, Ónix, Promesero, Mercurio, La Silueta, La Malena, La Candela, La Tequilera, Brisma, La Madona, La Aristocracia y La Ambición, además de los hijos de las inseminaciones que se han realizado con ejemplares de las caballerizas más famosas del país.
Yeguas y caballos del criadero La Macana.
Por boca de Hernando Gómez Bustamante se sabe que una pajilla de su mejor caballo, Honor, se puede comprar en Agrícola La Macana. Sólo hay que ponerse en contacto con los veterinarios Alejandro García o el doctor Rodríguez, quienes al parecer son los encargados de la salud y el cuidado físico de los caballos de la hija de “Rasguño”. También se sabe que el semen de los reproductores más sobresalientes de este criadero son cuidados y almacenados con la criogenia más avanzada del país. Las yeguas, caballos y potros no se venden sin que Viviana Gómez le consulte primero a su papá. El año pasado decidieron que sólo iban a criar y preparar caballos diagonales ‒que caminan con un ritmo de dos tiempos: mano-pata-mano-pata‒, ya que a “Rasguño” nunca le han gustado los finos que caminan en cuatro tiempos‒mano-pata-pata-mano‒.
Al ver las fotos de los caballos que pastan en Agrícola La Macana, se puede ver el número 59 marcado con hierro hirviente en el lado superior izquierdo. La razón de ese dígito es que son los últimos dos números del año de nacimiento del capo, 1959. “Rasguño” nació el 14 de marzo de ese año.
En sus post, el capo da recomendaciones de gran sabiduría agrícola. Dice, por ejemplo, que para levantar un criadero se debe tener paciencia, se debe ahorrar dinero, se debe tener criterio de criador y no de vendedor. Además, aconseja en qué momento se deben sacar los potros a los potreros, cuándo se deben pasar por el torno para que aprendan a andar, en qué etapa se les pone la silla y hasta qué caballos deberían cruzarse con otros para valorizar el andar colombiano.
“Rasguño” ya no tiene la omnipotencia que lo caracterizaba. En el foro suele pedir consejos sencillos, como: qué caballo “trotón” se le puede poner a su yegua “Brisna” o qué ejemplar sería digno de La Malena. Además, se descarga en elogios con facilidad. Afirma que el mejor criadero de Colombia ha sido La Luisa, ubicado en Jamundí, Valle del Cauca. Hasta hace poco, ese criadero perteneció a otro reconocido narcotraficante, Mario Valencia, alias “El caballista”, quien en la vida social del país sólo era reconocido por haber sido el esposo de la patinadora Luz Mery Tristan. “Rasguño” cuenta que en ese criadero su familia compró a finales de 2000 cerca de 100 embriones de paso fino y 25 de diagonales de las yeguas más cotizadas de América Latina. Hoy La Luisa se encuentra en poder de la Dirección Nacional de Estupefacientes.
Último Post, 27 de abril de 2011.
"Rasguño” tiene más de 200 seguidores que opinan, pelean, lo defienden, le hacen reverencia, aplauden sus comentarios y hasta se rasgan las vestiduras en honores por él. Todavía existe admiración por aquel mito llamado “Rasguño”, ese hombre que compraba caballos de doscientos mil dólares, que no era capaz de venderlos en un millón, que llegaba a ferias en los mejores carros y con las mujeres más bellas, que un día de borrachera vendió todo su criadero y después tuvo que volverlo a comprar, que “cabalgateaba” con “Chupeta”, que tenía un freno de oro, pero que no se lo ponía al caballo porque no andaba; que apostaba millones en ferias; que fue capaz de llevar diez toneladas de cocaína en una sola noche a Estados Unidos; que ayudó a fundar las Autodefensas con Carlos Castaño; que le pagó a Maradona para que lo ayudara en Cuba; que acusó a varios políticos de haber matado a Álvaro Gómez Hurtado, y que hoy llora por sus hijas en una cárcel estadounidense, que se arrepiente de no estar a su lado, pero con la que tiene comunicación para alimentar su gran pasión por los caballos.
«Un derecho que ni las rejas me lo quitarán» Mercuriogalope.



