Isabel Romero es un claro ejemplo de cómo el deporte puede transformar su vida. Su historia comienza en un entorno marcado por la prostitución, la drogadicción y la violencia, situaciones que son lamentablemente comunes para muchos jóvenes en Colombia, a sus 17 años, esta joven decidió tomar un rumbo diferente en su vida, sin importar el precio que tuviese que pagar por ello.
Isabel tuvo un pasado oscuro en el que estuvo involucrada en actividades delictivas y peligrosas, vinculadas a grupos conocidos como 'combos'.
"Cuando se entra a esos 'combos', uno sabe que al estar ahí la única forma de salirse es muerto", señaló Isabel, contando que dos de sus amigas vivieron las consecuencias de entrar en este peligroso mundo.
Sin embargo, su perspectiva cambió cuando una cancha de rugby fue construida cerca de su hogar en Medellín. Personas de su entorno, como lo fueron David Jaramillo, Alejandra Betancourt y a que Isabel la invitaron a descubrir un deporte que pronto se convertiría en su salvación.
“En ese partido yo vi cómo se golpeaban y dije por Dios que yo a esto no me meto”. Pero había una niña que siempre me chicaneaba y me decía que yo era muy flaca y que no tenías las capacidades para jugar rugby. Entonces me dije a mí misma que no podía rendirme", una motivación muy especial fue el empujón final que tuvo Isabel para comenzar a practicar este deporte.
Al ingresar a Rugby, Isabel se sorprendió por la intensidad y la competitividad que se vive en la cancha de juego. Sin embargo, con el tiempo, descubrió que este estilo de vida no era solo un deporte de contacto físico, sino también un espacio para el trabajo en equipo, la disciplina y el crecimiento personal.
Lo cierto es que, el rugby se convirtió en una herramienta poderosa para la vida de esta joven, que resurgió entre la violencia y le brindó una nueva perspectiva de la vida, enseñándole valores como la solidaridad, el respeto y la superación personal.
"Gracias al rugby ahora tengo disciplina, uno empieza a ser constante con sus horarios, entonces uno programa su día. Ir al gimnasio, hacer tareas, entrenar se convierten en el nuevo estilo de vida y a uno no le queda tiempo libre para pensar en cosas malas", contó a Isabel.
Además, el apoyo de la Fundación RedAssist Rugby Social, liderada por la presidenta, Adriana Bernal, fue fundamental en el proceso de transformación de esta joven paisa.
Una organización colombiana que trabajaba para empoderar a jóvenes a través del rugby y ofrecía un espacio seguro para qué desarrollarán habilidades sociales, emocionales y físicas.
“Dios la bendiga por todo lo que está haciendo, es una gran persona al contribuir a esta causa. No cualquiera confía para hacer esto, y es maravilloso, Dios le pague", expresó la deportista a la directora de la Fundación.
En cuanto a la información sobre el equipo de Rugby, para el año 2020, las jugadoras convocadas para el partido clasificatorio fueron: Alejandra Betancur, Ángela Alzate, Natalia Barajas, Ailyn Carolina Andrioly, Maribel Mestra, Julieth Tatiana Hernández, Laura Valentina Álvarez, Isabel Romero, Leidy Soto, María Isabel Arzuaga, Leidy García, Yina Marcela Quintero, Annagith Marsellis Vargas, Maira Alejandra Martínez, Maira Antonia Cortes, María Camila Castrillón, entre otras colombianas.
