Lina Tejeiro destaca por ser una de las actrices más llamativas en las redes sociales, si bien a lo largo de su carrera ha demostrado el talento que tiene para la actuación, el contenido que publica en sus redes sociales es llamativo para millones de personas.
Es en Instagram donde la actriz es más activa, allí comparte algunas cosas divertidas de su día a día, detalles de su trabajo y su vida personal, así mantiene un lazo más estrecho con sus fans.
Hace poco sobrepasó los 8 millones de seguidores en esta red social y son su carisma y elocuencia uno de los motivos por los que es una de las favoritas para seguir y echarse a reír un rato, así lo demostró en sus más recientes Instagram Stories.
Mientras estaba acostada, la nativa de Villavicencio hablaba con sus seguidores y les contaba que tenía que grabarse para un casting que iba a hacer, pero el ruido del exterior no la dejaba entonces tenía que esperar.
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Entonces Lina Tejeiro se pone a hablar de un libro por el que algunos internautas le han preguntado: “Me han estado preguntando demasiado por el libro que publiqué ayer en las historias”, en ese momento, su perrita estaba al lado y empieza a gruñir, “si no es el vecino es aquí mi vecina…”, y señala a la mascota un poco ansiosa.
“Volviendo al tema, el libro que publiqué ayer en las historias, siempre se los he dicho, van a decir: ‘¿esta vieja no lee más libros?’ y es que no (risas), lo que pasa es que son cuatro, voy en el segundo, este es ‘Conversaciones con Dios’, la vez pasada, hace como un año que estaba muy empeliculada estaba leyendo ‘Conversaciones con Dios 1’, es muy chévere. Me gusta porque es como un manual sobre la vida, tiene que ver con Dios, pero no exactamente sobre la religión, explican muchas cosas de las religiones, habla de la humanidad, habla de la sexualidad, habla de muchas cosas que uno dice: ‘¡Ah!’, por ejemplo, voy a decirles algo que llegó ayer en medio de mi inspiración, ‘la pregunta central en cualquier decisión es: ¿qué haría ahora el amor? El amor por ti mismo y el amor por todos los afectados e involucrados, si se aman unos a otros no harán nada que crean que podría lastimar a alguien’, ay, qué lindo”.
Sin embargo, en ese instante su perrita la interrumpe y empieza a hacer unos movimientos extraños contra la cama, “Dios mío, yo estoy hablando de Dios y ella, ¡Kimy! No me respeta, por Dios, señorita, ¡aléjate satanás!” y termina echada riéndose a carcajadas.
