Los cuatro Grand Slams: el Abierto de Australia, Roland Garros, Wimbledon y US Open acordaron unificar criterios para “dar una mayor consistencia en las reglas del tenis y mejorar la experiencia de los jugadores y los fanáticos”.
La nueva regla indica que en caso de empate 6-6 en el último set, el tie-break se jugará a diez puntos.
Hasta ahora, el Abierto de Australia contaba con desempate a siete puntos en el quinto set con 6-6, Wimbledon, desempate a siete puntos con 12-12, Roland Garros, a diferencia de dos juegos en el quinto parcial, y el US Open, con desempate en el 6-6 del quinto.
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"Los puristas quizá estén decepcionados, pero nosotros estamos orgullosos de poder alinearnos con los otros tres Grand Slam", comentó la directora de Roland Garros, Amélie Mauresmo.
Esta disposición estará vigente a modo de prueba en el próximo torneo de Roland Garros, que se jugará del 22 de mayo al 5 de junio. Se utilizará tanto en los partidos individuales, como en dobles, en silla de ruedas, y junior. La comisión organizadora de los Grand Slam planea revisar esta medida durante un año completo, antes de instalarlo como norma permanente.
"Los Grand Slam quieren intentar la experiencia durante una temporada completa, tras consultar con la WTA (circuito femenino), la ATP (circuito masculino) y la ITF (federación internacional) antes de hacer perenne ese cambio de regla", indicaron los cuatro Grandes (Abierto de Australia, Roland Garros, Wimbledon, US Open) en un comunicado conjunto.
En las últimas temporadas, el Grand Slam francés era el único en dejar que los partidos prosiguieran hasta que un jugador conquistase el último set con dos juegos de ventaja.
El Abierto de Australia ya contaba con el super tie-break con 6-6 en el quinto set, Wimbledon tenía un tie-break pero con empate a 12 juegos, y el US Open tenía un tie-break con 6-6 en el quinto set.
"La idea es también dar más satisfacción a los aficionados que aman este momento decisivo y lleno de suspense al final del partido. En términos de programación da más visibilidad, en particular para las televisiones, aunque globalmente era un porcentaje de partidos bastante pequeño el que era afectado", añadió Amélie.
La directiva de los Grand Slams planea revisar esta medida durante el curso de un año completo, antes de implementarlo como norma permanente.