Este 10 de octubre, el equipo de Vorágine, un portal de investigación periodística de renombre en Colombia, emitió un comunicado impactante. En él, anunciaron la suspensión indefinida de la publicación de investigaciones relacionadas con el paramilitarismo y el narcotráfico, citando “situaciones que comprometen nuestra seguridad”.
Este anuncio ha desatado una serie de reacciones en el ámbito político y social, entre ellas la más notable la del presidente Gustavo Petro.
En su cuenta de X, Petro expresó su preocupación: “Esto no puede ocurrir en nuestro país. He ordenado activar de inmediato las rutas de seguridad para este caso, así como para otros seis periodistas que, junto con la FLIP, hemos identificado como de alto riesgo”. Con esta declaración, el presidente busca poner de relieve la importancia de proteger a los periodistas en un país donde la libertad de prensa enfrenta constantes amenazas.
La decisión de Vorágine refleja una dura realidad para el periodismo en Colombia, donde la investigación sobre el paramilitarismo y el narcotráfico conlleva riesgos significativos.
A lo largo de los años, muchos periodistas han sido objeto de intimidaciones, ataques e incluso asesinatos por sus trabajos que exponen la corrupción y la violencia en el país. El hecho de que un portal de la relevancia de Vorágine sienta que debe suspender su labor investigativa resalta la grave crisis de seguridad que enfrentan los comunicadores en la actualidad.
El contexto de la suspensión de Vorágine es alarmante. La violencia ligada al narcotráfico y al paramilitarismo sigue siendo una realidad palpable en Colombia, afectando no solo a los periodistas, sino a toda la población.
La decisión de Vorágine de frenar sus investigaciones puede interpretarse como un acto de desesperación, un intento de salvaguardar la vida de quienes se atreven a contar la verdad en un entorno hostil.
La FLIP (Fundación para la Libertad de Prensa) ha estado al frente de la defensa de los derechos de los periodistas y ha respaldado la acción de Vorágine, advirtiendo sobre el clima de inseguridad que impera en el país. La suspensión de publicaciones por parte de un medio de investigación puede verse como un retroceso en la lucha por la verdad y la justicia, y pone de manifiesto la necesidad urgente de medidas efectivas para garantizar la seguridad de quienes informan sobre estos temas críticos.
Desde Kienyke.com rechazamos las amenazas de las que han sido víctimas los colegas de Vorágine. Enviamos nuestro apoyo en su labor de informar al país a través de sus investigaciones y exigimos que se brinden garantías que protejan la libertad de prensa.
