El sector de la construcción se ha visto duramente golpeado en este 2023 debido a la caída en la compra de vivienda nueva en Colombia.
Según cifras de Camacol, en los primeros cuatro meses del año, las ventas disminuyeron en un 55% respecto al año anterior, esto debido a varias razones que generan incertidumbre tanto en compradores como en constructoras.
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Y eso no es todo, los desistimientos en los proyectos de vivienda también han crecido de forma exponencial, por lo que el llamado desde los diferentes sectores a tomar acciones en urgente.
En KienyKe.com, repasamos algunas de las razones de esta estrepitosa caída que tiene las alarmas encendidas en los colombianos.
Lo primero que hay que decir es que debido al cambio de gobierno, hubo grandes retrasos en la entrega de subsidios, específicamente en el caso de 'Mi casa ya', en el que más de 10.000 familias se vieron afectadas y actualmente, varias de ellas se encuentran a la espera de una solución.
Conozca las razones sobre la caída en la venta de vivienda nueva en Colombia:
En el caso de este subsidio en concreto y según apuntan desde el ministerio de Vivienda, el gobierno de Iván Duque, dejó desfinanciado el programa, por lo que tuvieron que esperar la aprobación de nuevos recursos para la implementación del mismo.
Otro aspecto a tener en cuenta, y por más paradójico que suene, es que el aumento del salario mínimo afectó la compra de vivienda nueva y produjo muchos desistimientos en la vivienda vis, debido a que quienes ya tenían firmadas sus promesas de compra venta para este año o años futuros, se enteraron que el valor que se habló durante el inicio de la negociación era una proyección, y que en realidad el valor final se daría en salarios mínimos de acuerdo a la fecha de la firma de escrituras.
Para poner un ejemplo de este caso, un proyecto vis en Bogotá adquirido sobre planos en el año 2020 en una zona estrato tres tenía un valor en ese entonces de 150 a 155 millones de pesos. Sin embargo, como la firma de escrituras es tres o cuatro años después, justo antes de la entrega del inmueble, y esta se paga en salarios mínimos del año en curso (150 salarios mínimos en promedio), el proyecto pasó de costar la cifra anteriormente mencionada, a valer entre los 170 y 175 millones de pesos, lo que provocó que muchos opten por la opción de desistir de sus proyectos.
Como tercer ítem tenemos el alto valor del metro cuadrado en ciudades como Bogotá y el incremento en las tasas de interés en las distintas modalidades de crédito, lo que provocó que los colombianos se aprieten el cinturón y lo piensen dos veces al momento de endeudarse.
Lo cierto es que tanto desde el sector de la construcción como los colombianos, le piden al Gobierno Nacional un salvavidas que permita que el sueño de tener casa propia, no se vea truncado por los factores anteriormente mencionados.