Desde el pasado sábado 31 de agosto, Colombia enfrenta una creciente crisis de movilidad y transporte a raíz del incremento del precio del combustible.
El Gobierno Nacional, en un esfuerzo por compensar el déficit de $6.000 en el Fondo de Estabilización de Precios del Combustible (Fepc), autorizó un aumento significativo en el precio del galón del diésel, que ahora supera los $11.000. Esta medida ha desencadenado una serie de protestas y bloqueos por parte de los camioneros en diversas regiones del país.
¿Dónde se mantienen los bloqueos por el precio del ACPM?
El impacto inmediato del aumento del precio del diésel se ha hecho sentir en el departamento de Santander, donde un grupo de transportadores ha bloqueado vías clave.
Entre las rutas afectadas se encuentra la que conecta Bucaramanga con la costa Caribe, una arteria vital para el comercio y la distribución en la región. Otra vía bloqueada es la carretera de El Socorro, que conecta Bucaramanga con Bogotá, lo que agrava aún más la crisis de transporte en el país.
Iván Gustavo Mantilla, representante de los camioneros, ha subrayado la gravedad de la situación, afirmando en una entrevista con La FM de RCN:
“Venimos socializando desde hace varias semanas sobre el alza del precio de combustible, porque esto es un golpe a todo Colombia. La mayoría de la canasta familiar se traslada en tractocamiones de los puertos a los centros de acopio a todas las ciudades”. Mantilla advirtió que el paro es indefinido y podría extenderse a otras regiones del país si no se llega a un acuerdo con el Gobierno.
¿Cuáles han sido las reacciones hasta el momento?
El alcalde de Bucaramanga, Jaime Beltrán, ha hecho un llamado urgente a los ministerios de Hacienda y de Transporte para que inicien mesas de diálogo con los transportadores.
En un mensaje en su cuenta de X, Beltrán instó a las autoridades a escuchar a los territorios afectados, señalando que “hoy Bucaramanga está bloqueada en su parte norte”.
En Caldas, la situación no es menos tensa. Álex López, presidente de la Asociación Caldense de Camioneros, anunció que el gremio ha decidido inmovilizar sus vehículos como protesta. López expresó su frustración con la administración del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, quien, según el líder transportador, incumplió su palabra tras una reunión la semana pasada.
Afectaciones en la movilidad en Bogotá
En la capital del país, Bogotá, también se están produciendo bloqueos intermitentes que afectan la movilidad.
Según varios medios los transportadores están bloqueando la vía La Calera, generando congestionamientos significativos. Además, la Carrera Séptima con calle 171 está siendo afectada, lo que complica aún más la situación del transporte urbano en la ciudad.
El impacto del incremento del ACPM en Bogotá.
El aumento del precio del diésel, que asciende a $1.904 por galón, se decidió en respuesta a la creciente presión financiera sobre el Fondo de Estabilización de Precios del Combustible.
Según el Ministerio de Hacienda, esta medida busca cubrir el déficit que ha acumulado el Fepc debido a los costos crecientes del combustible.
Sin embargo, el impacto de esta decisión ha sido inmediato y amplio, afectando no solo a los camioneros sino también a la cadena de suministro de bienes esenciales en el país.
Los bloqueos y paros en distintas regiones han demostrado la vulnerabilidad del sistema de transporte colombiano ante las fluctuaciones en los precios del combustible.
La situación sigue siendo incierta, con la posibilidad de que los bloqueos y las protestas se extiendan a otras regiones si no se llega a una solución.
El Gobierno, por su parte, enfrenta el desafío de equilibrar la necesidad de estabilizar el Fepc con las demandas de un sector crucial para la economía del país.
Mientras tanto, los ciudadanos y las empresas deberán prepararse para posibles interrupciones en el suministro de bienes y servicios, y esperar que las negociaciones entre el Gobierno y los transportadores logren resolver esta crisis lo antes posible.