La reciente edición de la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo) ha dejado una huella imborrable en la industria editorial latinoamericana. Organizada por Corferias y la Cámara Colombiana del Libro (CCL), esta 36ª edición, que se llevó a cabo del 17 de abril al 2 de mayo, atrajo a cerca de 600 mil visitantes, consolidándose como uno de los eventos culturales y profesionales más importantes del continente.
El punto culminante llegó el 1º de mayo, cuando se rompió el récord histórico de asistencia con la presencia de 103.000 personas, marcando así un hito en la historia de la FILBo.
Este año, la Feria ofreció una amplia gama de actividades culturales y profesionales, con más de 2.300 eventos que incluyeron conversatorios, charlas, encuentros y presentaciones de libros.
Uno de los aspectos destacados de esta edición fue el Salón Internacional de Negocios, respaldado por la Cámara de Comercio de Bogotá y ProColombia, que reunió a 84 empresas editoriales de 20 países. Durante este evento, se llevaron a cabo 1.148 citas comerciales que generaron expectativas de negocios por más de 6.1 millones de dólares, representando un aumento significativo con respecto a años anteriores.
Brasil, como País Invitado de Honor, deslumbró a los asistentes con un pabellón que reflejaba su diversidad natural y cultural, atrayendo a más de 320.000 visitantes. Además, se realizaron más de 130 actividades en torno a la cultura brasileña, desde clases de portugués hasta conciertos y charlas.
La FILBo también sirvió como plataforma para destacados escritores nacionales e internacionales, quienes participaron en conversaciones sobre temas que van desde la naturaleza y el medio ambiente hasta la literatura infantil y juvenil.
Entre los invitados destacados se encuentran Irene Vallejo, Rosa Montero, Silvia Rivera Cusicanqui, Eduardo Sacheri, Cho Nam-joo, Lídia Jorge y Santiago Posteguillo, entre otros.
Además, se conmemoró el centenario de "La vorágine" de José Eustasio Rivera, coincidiendo con la participación del departamento de Huila y su capital, Neiva, en la FILBo. Una exposición dedicada a esta obra emblemática exploró el contexto histórico y geográfico en el que se desarrolla la novela, brindando a los visitantes una comprensión más profunda de su importancia cultural.
La FILBo también se extendió más allá de Bogotá, con una nutrida programación en otras ciudades y regiones de Colombia. A través de alianzas con bibliotecas públicas, centros culturales y secretarías de cultura, la Feria llegó a lugares como Quibdó, Chocó; Nariño; Medellín; y Pereira, promoviendo así la descentralización de la oferta literaria y cultural en el país.
Por último, la FILBo reafirmó su compromiso con la inclusión al organizar 30 eventos con traducción a lengua de señas y proporcionar materiales accesibles para personas con discapacidad. La franja FILBo Incluyente, en colaboración con diversas organizaciones, se esforzó por garantizar que todos los visitantes pudieran disfrutar plenamente de la Feria.
Es así como a FILBo 2024 ha dejado una marca indeleble en el panorama cultural y editorial de América Latina, consolidándose como un evento imprescindible para los amantes de los libros y la literatura. Con España anunciado como País Invitado de Honor para el próximo año, las expectativas para la edición 2025 son aún más altas, prometiendo otro emocionante capítulo en la historia de la Feria Internacional del Libro de Bogotá.
