La Policía Nacional informó que el contrato de más de 9.000 millones de pesos para dotar al Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), con armas y herramientas de protección es derivado de la planeación realizada desde 2019 y no se concretó en medio de la emergencia sanitaria.
"Esto no fue una medida improvisada, por eso hay que señalar que el proceso de adquisición de esta munición cumple con las normas presupuestales y contractuales vigentes en Colombia", aseguró el director de la Policía, general Óscar Atehortúa,
El congresista Wilson Arias, del Polo Democrático, denunció el 06 de mayo con un documento de la Dirección Administrativa de la Policía que 2.3 millones de dólares se invertirían en la compra de 81.000 latas de gases lacrimógenos, 23.775 esferas marcadoras, 11.000 granadas de aturdimiento, 5.000 multi-impacto y 13.000 cartuchos calibre 12.
Por lo que la cabeza de la institución aseguró que la contratación está relacionada con la necesidad de adquisición de una munición menos letal, que debe cumplir con las normas técnicas del Ministerio de Defensa y las especificaciones técnicas de la Policía Nacional.
"Un plan anual de compra que establece qué elementos, qué bienes y qué servicios se van adquirir a lo largo del 2020", agregó.
Con esto las autoridades pretenden seguir garantizando la seguridad nacional y el mantenimiento del orden público, porque no pueden permitir la generación de hechos violentos que afecten el normal desarrollo de las manifestaciones públicas y pacíficas, consagradas como un derecho constitucional en Colombia.
De igual forma, en el comunicado la Dirección Administrativa y Financiera de la Policía explicó el proceso de compra de elementos para el Esmad, viene siendo realizado desde hace varios meses atrás y no inició en medio del aislamiento obligatorio.