La búsqueda de Sara Sofía sigue vigente y este 26 de abril se conoció una nueva declaración de Nilson Díaz, la expareja de Carolina Galván, la madre de la menor. El padrastro dijo ante la Fiscalía que la niña está muerta y que cree que fue por los golpes que le daba Carolina.
El paradero de Sara Sofía tiene a las autoridades partiendo de dos hipótesis: la primera, que la niña está viva y pudo ser regalada o vendida, incluso se cree que puede estar en Bucaramanga; la segunda, que la niña murió y fue lanzada al caño de Tunjuelito por el mismo Nilson Diaz.
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Esa última teoría es la que más han resaltado Carolina y su expareja. Nilson Díaz dibujó el pasado viernes un mapa en el que dice dónde habría tirado el cuerpo de Sara Sofía, que tenía casi dos años cuando desapareció.
La fiscal que lleva el caso interrogó al padrastro partiendo de ese testimonio para que explicara por qué habría muerto la niña. Hasta el momento se conocía el testimonio de Carolina Galván, quien contó que ese 27 de enero ella salió de la casa y dejó a Nilson Díaz cuidando de la menor. La mujer fue a conseguir dinero como trabajadora sexual y cuando regresó, la niña ya estaba muerta.
“A las 6 de la tarde Nilson se para a mirar la niña y me llama: ¡Caro, venga!”, relata la madre. Al ver a la niña botando espuma por la nariz, la mujer se atacó a llorar. “Yo empezaba a mover la niña para que se despertara y ya no despertó", dijo la mamá de Sara Sofía.
Nilson Díaz le comentó a la fiscal la razón por la que creía que Sara Sofía estaba muerta. “Para mí fueron los golpes que le dio Carolina. – Afirmó el padrastro –. Lo único es que Sarita, cuando llegó a la casa, tenía soltura, y yo le di agua de ajos hervida con un pedacito de panela, y eso la curó”.
El hombre que reside en la cárcel La Picota también argumentó que el maltrato a la menor era por no recibir la comida. “Carolina se puso furiosa y estaba tratando muy mal a la niña. La cogió y se la llevó para el baño y le pegó una cachetada en la carita, y ahí le moreteó un ojito y parte de la frente”, confesó.
Los últimos momentos de Sara Sofía los habría pasado acostada al lado de sus hermanitos viendo una película. Cuando él se despertó, la niña “tenía los labiecitos morados”, según lo que contó en la declaración.
Díaz también mencionó que la niña falleció “de pena moral”, pues le aseguró a la fiscal que “Sarita llamaba mucho a Nina”. El padrastro no tiene claro si la niña se refería a “la señora Rita o la hija de ella”, quien al parecer era la persona que la cuidaba.
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Por su parte, la familia de Sara Sofía, especialmente su tía Xiomara Galván, mantienen la esperanza de que la niña siga con vida. En este momento están ofreciendo una recompensa por información de la niña y la Policía Metropolitana también habilitó un número para quien quiera dar nuevos datos de la menor. El número es: 3057477809.
Xiomara Galván ha recibido varias llamadas desde Bucaramanga que afirman haber visto una niña con características similares. La tía no dudó en viajar al departamento para averiguar más y le dijeron que a Sara Sofía la están haciendo pasar por un niño para que no la encuentren.
Por el momento, las labores de la Defensa Civil no se detienen, en especial en el sector del río Tunjuelito que separa a las localidades de Kennedy y Bosa, en el suroccidente de Bogotá.