En una audiencia de imputación de cargos llevada a cabo este lunes, el principal sospechoso del asesinato de Juan Felipe Rincón Morales, hijo del inspector general de la Policía Nacional, William Rincón, fue judicializado ante un juez de control de garantías en Bogotá. Andrés Camilo Sotelo Torres, de 33 años, enfrenta acusaciones de homicidio tras el asesinato del joven de 21 años, ocurrido el pasado domingo 24 de noviembre en el barrio Quiroga, en la localidad de Rafael Uribe Uribe, al sur de la ciudad.
El fiscal que presentó el caso ante el juez 76 de control de garantías reveló nuevos detalles del crimen, explicando que Sotelo Torres habría disparado contra Rincón Morales luego de una confrontación por motivos de intolerancia. Según el representante del ente acusador, un testigo habría señalado directamente a Sotelo Torres como el responsable de disparar en varias ocasiones al joven, lo que resultó en su muerte, a pesar de los esfuerzos de su escolta, un agente de la Policía Nacional, para protegerlo.
"Una persona lo señala concretamente de ser la persona que procedió, a raíz de una situación de intolerancia y enfrentamiento con la víctima, a disparar en varias oportunidades, logrando impactar varias partes de ese ciudadano. A pesar de la actividad que se hizo para salvaguardarlo por parte de un protector, es decir, de un agente que fungía como su escolta, pues esta persona pierde la vida", detalló el fiscal durante la audiencia.
Por su parte, la defensa de Sotelo Torres rechazó las acusaciones y argumentó que su cliente no portaba un arma de fuego, sino un arma traumática. El abogado defensor, Carlos Fernando Galeano, sostuvo que el disparo fatal provino del arma de fuego de otro individuo en la escena, el patrullero de la Policía Nacional, Sergio Felipe Rico, quien según el defensor, se encontraba bajo los efectos de drogas al momento del incidente.
Según el relato de la defensa, Sotelo Torres habría agredido a la víctima con el arma traumática, y fue en ese momento cuando el escolta de Rincón, en un estado de "alucinamiento", sacó su arma de fuego y disparó, hiriendo a Juan Felipe Rincón. "El señor Sergio Felipe Rico, patrullero, en su estado de alucinamiento, grita '¡Policía Nacional!' y comienza a apuntar... en total hizo 10 disparos, de los cuales uno impactó a Juan Felipe", argumentó Galeano, quien también presentó detalles sobre la escena del crimen, incluyendo la destrucción parcial del arma traumática de Sotelo Torres.
El abogado también ofreció detalles polémicos sobre la relación entre Juan Felipe Rincón y una menor de 15 años, quien, según su versión, fue abordada por el joven la noche anterior a su muerte. "Ellos salen el día sábado en la noche y la recoge en el Centro Comercial Titán Plaza, la lleva al apartamento, y comparten la noche. La niña Sara no fue en ese momento ni abusada, el joven Juan Felipe trató de abusar de ella, pero no lo cometió, sí la manoseó", sostuvo el defensor, agregando que el joven estaba bajo el efecto de drogas y bebidas alcohólicas en ese momento.
El caso ha generado una amplia atención pública debido a la implicación de un alto oficial de la Policía y el contexto de la tragedia, que involucra tanto cuestiones personales como presuntas irregularidades en las actuaciones de los involucrados. Las autoridades han continuado con las investigaciones para esclarecer completamente los hechos que rodearon la muerte de Juan Felipe Rincón Morales.